Qué hacer si le he quitado el chupete a mi bebé y no duerme

Quitar el chupete a un bebé puede ser un cambio importante en su rutina y puede afectar su capacidad para conciliar el sueño, al menos temporalmente. La adaptación puede llevar un tiempo y es importante que sepas qué esperar durante este proceso.

En general, no debes preocuparte de inmediato si has quitado el chupete a tu bebé y ahora tiene dificultades para dormir. Es común que los bebés sientan la falta del chupete al principio, ya que puede haberse convertido en un objeto reconfortante y tranquilizador para ellos. En este artículo, te mostramos Cuánto dura el síndrome de abstinencia del chupete.

Los chupetes se han estudiado y recomendado para consolar, calmar ayudar a dormir, e incluso para aliviar el dolor en recién nacidos y bebés sometidos a procedimientos menores comunes en el departamento de emergencias (p. ej., punciones en el talón, vacunas, etc)^[1]. Por tal motivo, es común que los infantes sientan su falta al principio, ya que puede haberse convertido en un objeto reconfortante y tranquilizador para ellos.

La transición puede ser un desafío tanto para padres como para hijos. Tu bebé puede llorar o mostrar signos de inquietud durante las primeras noches sin el chupete. Esto es comprensible, pero con paciencia y las estrategias adecuadas, poco a poco se ajustará a la nueva realidad y volverá a dormir bien. La clave es mantener la calma y seguir una rutina de sueño constante. Tu bebé aprenderá a dormirse sin el chupete con el tiempo.

Es importante comprender las razones detrás de la decisión de quitar el chupete a tu bebé y cómo esto puede afectar su sueño. Aquí te mostramos por qué al quitarle el chupete a un bebé no duerme:

• Desarrollo dental: el uso prolongado del chupete puede afectar el desarrollo dental de tu bebé, como la alineación de los dientes. Los pediatras y odontólogos a menudo recomiendan retirar el chupete alrededor del primer año de vida.
• Dependencia: algunos bebés pueden volverse dependientes del chupete para conciliar el sueño. Si tu pequeño/a se despierta varias veces durante la noche y necesita que le vuelvan a colocar el chupete en la boca, esto puede afectar tanto a su sueño como el tuyo.
• Higiene: los chupetes pueden acumular gérmenes y suciedad. Esto puede ser un problema para la salud de tu bebé si no se mantienen limpios adecuadamente.

Si le has quitado el chupete y no duerme debido a estas razones, es un paso positivo para la salud a largo plazo de tu bebé. Sin embargo, es comprensible que tenga dificultades en la transición y que le cueste dormir sin él. En este artículo, te explicamos Por qué hay que cambiar el chupete a los 6 meses.

Si quieres saber cómo ayudar a tu bebé a dormir sin el chupete, presta atención a las siguientes estrategias:

• Consistencia: es clave en la rutina de sueño de tu bebé. Establece una rutina tranquila antes de acostarle, como un baño tibio, un cuento suave o una canción de cuna.
• Cuidado son los sustitutos reconfortantes: no reemplaces el chupete con un sustituto reconfortante, como almohadas o juguetes similares, colchas, edredones, cubrecolchones, sábanas que no estén ajustadas, mantas, cojines de protección o los productos relacionados que se unan a los barrotes o a los lados de la cuna. Estos objetos pueden aumentar el riesgo de que tu bebé se quede atrapado, se asfixie o se estrangule^[2].
• Ofrece consuelo: si le has quitado el chupete y no duerme, cuándo se despierte buscándolo, ofrécele consuelo de otras maneras. Acarícialo suavemente en la espalda o cántale una canción suave. La clave es ayudarle a volver a dormirse sin el chupete.
• Tiempo de adaptación: recuerda que la transición puede llevar tiempo. Tu bebé puede sentirse incómodo al principio, pero con paciencia y apoyo, se acostumbrará a dormir sin el chupete.
• Consulta con un profesional de la salud: si tu bebé sigue teniendo dificultades para dormir sin el chupete durante un largo periodo de tiempo, o si estás preocupada por su bienestar, no dudes en hablar con un pediatra o un especialista en sueño infantil. Pueden ofrecerte orientación específica y estrategias adicionales.

Quitar el chupete a tu bebé puede ser un paso importante para su salud a largo plazo, pero es natural que enfrentes desafíos en el camino, especialmente en lo que respecta al sueño. Recuerda que cada bebé es único, y lo que funciona para uno puede no funcionar para otro. La clave es tener paciencia y empatía mientras lo apoyas en esta transición. Confía en tu instinto como madre y busca ayuda si es necesario. ¡Ánimo, mamá! Estás haciendo un trabajo maravilloso cuidando de tu bebé.

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