¿Puedo tomar té chai en el embarazo?

La FDA clasifica el té chai seguro, pero también recomienda no consumirla en grandes cantidades durante el embarazo y la lactancia.^[1]En su forma tradicional, el té chai incluye una variedad de componentes que pueden causar efectos positivos para el organismo, pero también algunos negativos en la salud durante el periodo de gestación. Uno de ellos es consecuencia de la cafeína que se encuentra en el té negro, la base del chai. Por lo tanto, aunque no suele ser un problema en dosis normales, se debe evitar un consumo excesivo, especialmente en el primer trimestre.

Es recomendable que las mujeres embarazadas reduzcan la cantidad de cafeína que consumen a un máximo de 200-300 mg al día. Una taza promedio de té chai negro, de 235 ml y preparado en una infusión de tres minutos, contiene entre 30 y 80 mg de cafeína. Por consiguiente, se puede consumir 2 tazas de té chai al día sin superar el límite recomendado.

Por ejemplo, el regaliz, que a veces se utiliza como saborizante en algunas marcas de té chai, no es seguro durante el embarazo. Este ingrediente no es seguro durante el embarazo por su impacto en los niveles hormonales, lo cual podría provocar un parto antes de tiempo. Asimismo, el exceso de cafeína durante el embarazo ha sido vinculado con bajo peso al nacer, parto prematuro y un incremento en la probabilidad de sufrir un aborto espontáneo.

¿Qué contiene el té chai?

El té negro es el ingrediente principal que define el sabor característico del té chai, el cual se prepara con una combinación de especias como cardamomo, canela, clavo de olor, jengibre, vainilla, estrellado y, ocasionalmente, pimienta y sal. A pesar de que estas hierbas no son nocivas durante el embarazo, en grandes cantidades pueden provocar las contracciones del útero. Por ello, especialmente durante el embarazo y la lactancia, es fundamental moderar su ingesta diaria y elegir cuidadosamente la variedad de té.

Por otro lado, es muy importante disminuir el consumo de cafeína durante el embarazo, ya que se ha comprobado que esta sustancia puede atravesar la barrera placentaria y llegar al feto en desarrollo. A pesar de que algunas investigaciones indican que un consumo moderado (inferior a 200 mg al día) no causa daño, se aconseja restringirlo al mínimo^[2]. Una menor ingesta de cafeína beneficia al bebé en estas etapas.

Algunos de los riesgos potenciales de consumir té chai durante el embarazo incluyen:

• Estimulación de contracciones uterinas: algunas especias del té chai, como la canela y el jengibre, pueden estimular el útero y, en grandes cantidades, podrían aumentar el riesgo de contracciones prematuras.
• Aumento de la presión arterial: la cafeína, presente en el té negro base del chai, puede elevar la presión arterial y, en exceso, afectar el sistema cardiovascular tanto de la madre como del feto.
• Efecto diurético: la cafeína también tiene un efecto diurético, que puede llevar a una mayor pérdida de líquidos, dificultando la hidratación adecuada que es esencial durante el embarazo.
• Interferencia con la absorción de nutrientes: el té chai contiene taninos, que pueden interferir con la absorción de hierro, un mineral importante durante el embarazo, especialmente para prevenir la anemia.

Normalmente, se piensa que no es peligroso tomar infusiones durante el embarazo. Sin embargo, son altamente potentes, dado que provienen de plantas con efectos medicinales, motivo por el cual algunas infusiones pueden causar complicaciones durante la gestación. En este artículo encontrarás Las infusiones prohibidas en el embarazo.

Cuándo no tomar té chai en el embarazo

El hinojo, la menta y la cúrcuma son hierbas y especias que deben utilizarse con precaución, dado que ingerirlas con fines medicinales se ha vinculado con un aumento de hemorragias en el área del útero y la pelvis, lo que potencialmente podría estimular la menstruación.

Si estás tomando warfarina, un anticoagulante, es mejor evitar el anís estrellado, ya que puede potenciar sus efectos y, por lo tanto, resultar peligroso durante el embarazo.

Si consumes té chai en pequeñas cantidades y de forma ocasional durante el embarazo, es poco probable que experimentes efectos adversos significativos. Sin embargo, un consumo excesivo puede provocar los problemas mencionados anteriormente.

Puedes tomar té chai en todos los trimestres, sin embargo, los efectos del consumo de cafeína pueden ser más perjudiciales durante el primer trimestre.^[2]También puede interesarte consultar el artículo ¿Puedo tomar café descafeinado en el embarazo

Si deseas disfrutar de una taza ocasional de té chai durante el embarazo, puedes seguir estas recomendaciones:

• Elige variedades descafeinadas: existen opciones de té chai descafeinado, que te permitirán disfrutar del sabor sin los efectos de la cafeína.
• Reduce la cantidad de especias: si preparas tu propio chai, puedes reducir la cantidad de especias, especialmente aquellas que pueden estimular las contracciones uterinas.
• Consúmelo con moderación: limita el consumo de té chai a una o dos tazas por semana.
• Hidrátate: aumenta tu consumo de agua para compensar los efectos diuréticos de la cafeína.
• Consulta a tu médico: siempre es recomendable consultar con tu médico o matrona antes de introducir cualquier cambio en tu dieta durante el embarazo.

En conclusión, aunque el té chai puede ser una bebida deliciosa, es importante consumirlo con moderación durante el embarazo. Prioriza tu salud y la de tu bebé, y elige opciones más seguras si tienes dudas. No olvides que esta información tiene fines educativos y no sustituye el consejo médico profesional. Por ello, en caso de dudas, te recomendamos consultar a tu médico para obtener información personalizada sobre tu embarazo.

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