Por qué mi bebé tiene los ojos grises al nacer

Los bebés nacen con los ojos grises porque han permanecido en oscuridad dentro del útero y los melanocitos solo comenzarán sus funciones cuando entren en contacto con la luz luego del nacimiento. Por lo tanto, este cambio de color es consecuencia de la cantidad de melanina que hay en estos tejidos que, dependiendo de la genética, puede aumentar o disminuir con el tiempo hasta dar el color que finalmente se mantendrá durante su vida.

No cabe duda de que los bebés hacen una gran transformación desde que nacen hasta su primer año de vida. Esto no solo es visible en el crecimiento, sino también en el color de su cabello, piel y ojos, características pueden cambiar radicalmente con el pasar de los meses.

Por qué los melanocitos no producen melanina en el útero

La tonalidad de los ojos del bebé dependerá de la cantidad y de la distribución de la melanina en el iris. El iris es el anillo coloreado alrededor de la pupila negra, cuya función es proteger al ojo regulando la entrada de luz. Esta estructura ocular contiene gran cantidad de melanocitos, unas células que se encargarán de secretar melanina y, de esta forma, dar pigmento al ojo.

Mientras el bebé este dentro del útero, estas células permanecerán inactivas y no sintetizarán melanina, por lo tanto, el tejido no tendrá pigmento. Específicamente, la inmadurez del tejido ocular y de los melanocitos son la causa por la que los bebés adquieren este tono azul grisáceo en sus ojos en la primera etapa de vida.

Posteriormente, cuando el bebé entra en contacto con la luz solar, los melanocitos empiezan a secretar melanina de forma natural, produciendo un oscurecimiento de los tejidos, en este caso de los ojos. No es hasta después de unos meses que la cantidad de melanina comienza a regularse en este tejido siguiendo el código genético, lo que dará finalmente el color de los ojos.

Un gran porcentaje de bebés tienen los ojos grises los primeros meses de vida, haciéndose más azules, verdes o marrones, en la medida que va desarrollando su tejido ocular. Entonces, es casi imposible saber cuál será el color definitivo del bebé si solo nos guiamos por la tonalidad gris de los ojos del recién nacido.

Ciertamente, si el bebé tiene los ojos grises muy claros en los primeros meses de nacido es posible que la tonalidad sea clara, es decir, grises, azules, verdes o color avellana. Lo mismo ocurre con los bebés que tienen los ojos grises oscuros o marrones, cuya tendencia será que sean marrones o negros. En todo caso, solo queda esperar que los meses transcurran para confirmar nuestras sospechas.

En el siguiente artículo encontrarás más información sobre Cuándo se define el color de ojos de un bebé.

No hay una fecha específica en la que los ojos del bebé dejan de ser grises y cambian de color, pero lo normal es que permanezcan así los primeros meses. Eso sí, entre los 3 y 6 meses de vida podremos tener ya una idea de cuál será su tonalidad definitiva.

En este sentido, los melanocitos tardan aproximadamente un año en dar el color definitivo a los ojos de los bebés. Aunque el cambio de color se hace más lento después de 6 meses, puede seguir variando levemente su tono. Por esta razón, se recomienda esperar hasta los 18 meses, que es cuando el bebé tendrá un color de ojos bastante definido. Aquí te explicamos Cuándo cambia el color de ojos en los bebés.

La genética es la encargada de determinar si el bebé tendrá los ojos claros u oscuros y es la que establecerá las directrices para que se concentre en mayor o menor grado la melanina en el iris. Si se concentra gran cantidad de melanina, el color de los ojos del bebé será marrón oscuro. Si hay menor cantidad, adquirirá una tonalidad verde, gris o marrón claro y si hay muy poca cantidad, entonces serán grises o azules claros.

La complicada interacción de los genes que dan la tonalidad de los ojos hace técnicamente imposible predecir a ciencia cierta si los ojos del bebé serán claros, sin embargo, podemos tener en cuenta estas probabilidades:

• Si la madre y el padre tienen los ojos azules, es muy probable que el bebé los tenga azules, pero no está garantizado.
• Si la madre y el padre tienen los ojos marrones, es muy probable que el bebé tenga los ojos marrones.
• Si uno de los abuelos tiene los ojos azules, hay probabilidades de que el bebé tenga los ojos azules.
• Si la madre tiene los ojos azules y el padre marrones (o viceversa), hay una probabilidad del 50/50 que el bebé tenga los ojos azules.
• Si uno o ambos padres tienen los ojos verdes o avellana, el bebé podría tener ojos verdes o color avellana, pero es difícil saberlo con certeza.

En definitiva, es normal que nuestro bebé tenga los ojos grises al nacer por la poca cantidad de melanina contenida en su iris. El color de ojos irá cambiando y adquiriendo la tonalidad dictada por la genética del bebé, que estará bien establecida después del primer año de vida.

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