Por qué hay bebés que nacen con dientes: significado, porcentaje y riesgos

La presencia de dientes al nacer o poco después, es el resultado de un nacimiento dental precoz. Los dientes de leche (o primarios) comienzan a formarse durante la gestación, siguiendo un calendario de desarrollo preciso. En la mayoría de los casos, estos dientes permanecen dentro de las encías hasta varios meses después del nacimiento.

Sin embargo, en algunos bebés, este proceso se adelanta. Para poder entenderlo mejor, hace falta hacer una distinción importante entre:

• Dientes natales: son aquellos que ya son visibles en la boca del bebé, en el momento del nacimiento. Son los que más generan sorpresa.
• Dientes neonatales: son aquellos que erupcionan en la cavidad oral, durante los primeros 30 días de vida del bebé. Por eso existen casos que pueden salir los dientes al bebé en 2 meses.

La causa exacta de por qué algunos bebés que nacen con dientes, no siempre es clara, se han identificado varios factores:

• Posicionamiento superficial del diente: esta es la explicación más aceptada y común. Simplemente, el folículo dental de uno o dos dientes, está situado más cerca de la superficie de la encía de lo habitual. Esto hace que erupcione antes de tiempo, a veces incluso antes del nacimiento.
• Predisposición genética o factor hereditario: existe evidencia que sugiere un componente genético. Si hay antecedentes familiares de dientes natales o neonatales, es más probable que un bebé también los presente. Se han observado patrones de herencia autosómica dominante en algunos casos.
• Causa desconocida: en muchos casos, especialmente cuando es un hallazgo aislado en un bebé sano, no se puede identificar una causa específica más allá del posicionamiento superficial del germen dental. Se considera una variación normal del desarrollo dental.

Es importante saber, que la mayoría de los bebés recién nacidos con dientes están completamente sanos. La presencia de dientes natales y neonatales como un hallazgo aislado no suele ser indicativo de un problema de salud mayor.

La presencia de dientes en los bebés, es relativamente infrecuente, pero no es una rareza médica extrema. Las cifras de prevalencia pueden variar entre diferentes poblaciones, pero las estimaciones generales son las siguientes:

• Dientes presentes al nacer: la incidencia se sitúa comúnmente en un rango de 1 caso por cada 2.000 a 1 caso por cada 3.500 nacimientos vivos. Algunas fuentes pueden dar rangos un poco más amplios, pero consistentemente se considera un evento poco común.
• Dientes neonatales (erupcionan en los primeros 30 días): algunos estudios sugieren que los dientes neonatales podrían ser ligeramente más comunes que los natales, o que la incidencia combinada de ambos es la que se acerca a estas cifras. A veces, la distinción no es tan estricta en los reportes.

En general, aunque no es algo que se vea todos los días, los pediatras y odontopediatras están familiarizados con esta condición. No es posible predecir con certeza si un bebé nacerá con dientes; es una de esas pequeñas sorpresas que a veces trae la naturaleza.

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Cuando un bebé nace con uno o más dientes, hay varias observaciones y posibles implicaciones que el equipo médico y los padres deben considerar. En primer lugar, las características de los dientes, el número de dientes, la estructura y apariencia, la movilidad, etc.

Las implicaciones para el bebé, incluyen:

• Riesgo de aspiración: si un diente natal está muy flojo, existe el riesgo de que se desprenda espontáneamente y el bebé lo inhale o lo trague (aspiración o ingestión). La aspiración hacia las vías respiratorias es una emergencia médica grave.
• Lesiones en la lengua: la fricción constante del borde del diente, contra la superficie inferior de la lengua durante los movimientos de succión al alimentarse, puede causar una úlcera dolorosa que dificulta la alimentación.

Las implicaciones para la madre, incluyen:

• Dolor o en el pezón: los dientes natales pueden causar dolor, irritación, grietas o incluso pequeñas heridas en el pezón de la madre durante la succión. Esto puede hacer que la lactancia materna sea una experiencia muy dolorosa y difícil de mantener.
• Dificultad en el agarre: la presencia de los dientes, podría interferir con la capacidad del bebé para lograr un agarre profundo y efectivo al pecho, lo que también puede contribuir al dolor materno y a una transferencia de leche ineficiente. Aquí te dejamos algunas "Señales de mal agarre en la lactancia" que te pueden interesar.
• Posibilidad de amamantar: a pesar de estos desafíos, muchas madres logran amamantar exitosamente a bebés con dientes natales. A veces esto requiere ajustes en la posición, que el bebé aprenda a succionar de manera diferente, o el manejo del diente (ver siguiente sección).

Si tu bebé nace con dientes, lo primero es mantener la calma y seguir estos pasos:

• Informar al personal médico inmediatamente.
• Observación y mantenimiento: si el diente está relativamente firme, y no causa lesiones al bebé ni a la madre, se deja el diente en su lugar y se realiza un seguimiento cercano.
• La extracción del diente se considera cuando está muy flojo y existe un riesgo real de que el bebé lo aspire o lo trague. Causa lesiones significativas y dolorosas en la lengua del bebé que no mejoran y dificultan la alimentación.
• Cuidado oral del bebé: los padres deben limpiarlo suavemente después de cada toma, con una gasa limpia y húmeda o con un dedal de silicona para bebés, para eliminar restos de leche y prevenir la caries temprana (caries del biberón). Incluso si no hay dientes, se recomienda limpiar las encías del bebé de la misma manera.
• Apoyo a la lactancia materna: si el diente causa problemas al momento de amamantar, puedes encontrar posiciones de agarre que minimicen el contacto del diente con el pezón.

¿Los bebés que nacen con dientes son más inteligentes? ¿Qué significa que un niño nazca con dientes? La aparición de bebés que nacen con dientes, ha sido interpretada de muchas maneras a lo largo de la historia y en diferentes culturas. Es importante separar las creencias populares de la comprensión médica actual.

Desde el punto de vista médico, nacer con uno o dos dientes es simplemente una variación del desarrollo dental normal. Se considera un fenómeno benigno, donde los dientes de leche han erupcionado de forma precoz.

No es un indicador de desarrollo general precoz, ni de inteligencia superior, ni de ninguna habilidad especial. No suele predecir problemas con la erupción de los dientes permanentes.

La presencia de dientes neonatales, puede ser una de las características de ciertos síndromes genéticos raros. En estas situaciones, serían solo un signo dentro de un conjunto de múltiples otros hallazgos físicos o del desarrollo, que llevarían a una evaluación médica más exhaustiva para llegar a un diagnóstico sindrómico. Es fundamental no asumir la presencia de un síndrome, solo porque un bebé nace con dientes.

Existen algunos mitos sobre los niños que nacen con dientes como que son un mal presagio o dan mala suerte, sobre todo en culturas como China, India o Polonia, pero esto no tiene ninguna certeza. Son tan solo mitos sin base. También hay quien cree que son un síntoma de un problema de salud (completamente falso) o que provocarán un babeo excesivo en el niño.Si bien es interesante conocer estas perspectivas históricas y culturales, es vital basar la comprensión y el manejo de los dientes natales en el conocimiento científico y médico actual. Las supersticiones, no tienen cabida en la toma de decisiones sobre la salud del bebé.

Para los padres, el significado más inmediato suele ser de sorpresa, seguida de curiosidad y, a menudo, una lógica preocupación hasta que reciben información clara y tranquilizadora por parte de los profesionales de la salud. Pueden preguntarse si es normal, si le dolerá al bebé, o cómo afectará la alimentación.

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