Papilla de frutas y galletas para bebés: receta, beneficios y recomendaciones


Cuando inicia la alimentación complementaria, elegir los alimentos y comidas que se ofrecerán al bebé no siempre es una tarea fácil. Estos deben cumplir con ciertas características para que sean adecuados, como, por ejemplo, ser ricos en nutrientes y, además, ser bien aceptados por el bebé. Una de las opciones que cumple con estas características es la papilla de frutas y galletas. Esta es una receta deliciosa, nutritiva y fácil de preparar, que puede ser parte de la dieta de tu bebé, especialmente en los desayunos y meriendas. Lo mejor es que puedes añadir distintas frutas y combinar sabores, texturas y nutrientes.
Papilla de frutas y galletas para bebés: receta, beneficios y recomendaciones en este artículo de paraBebés te explicamos cual es la edad indicada para introducir esta receta en la dieta del bebé, los beneficios de su consumo y algunos consejos que debes tener en cuenta a la hora de prepararla.
¿A qué edad puede un bebé comer papilla de frutas y galletas?
Lo ideal es ofrecer papilla con frutas y galletas a partir de los 7 meses, edad en la que el bebé tiene la capacidad de comer y procesar de manera adecuada estos alimentos. Ahora, si deseas ofrecerla desde los 6 meses, cuando empieza la alimentación complementaria, puedes hacerla solo con las frutas, sin adicionar las galletas.
Las galletas pueden introducirse en la dieta del bebé a partir de los 7 meses. Esto se debe a que no son un alimento esencial en la dieta del bebé y que, además, la mayoría de ellas contienen gluten, una proteína que puede ofrecerse solo a partir del séptimo mes.
Por estas razones, lo mejor es esperar hasta los 7 u 8 meses para ofrecer papilla de frutas y galletas. Así, el bebé aprovechará los beneficios de esta receta sin el riesgo de problemas digestivos y tendrá un mayor control a la hora de masticar y tragar alimentos sólidos, en este caso, las frutas y galletas.
¿Qué tipo de galletas son adecuadas para bebés?
Lo habitual es que se ofrezcan las papillas a bebés con galletas tipo María; sin embargo, este tipo de galletas son ricas en azúcares, que no son adecuados para bebés menores de 2 años. Por ello, a la hora de elegir las galletas para la papilla, presta atención a los siguientes aspectos:
- Sin azúcares añadidos: las galletas para bebés deben ser sin azúcares añadidos, pues no son recomendables en esta etapa de desarrollo. Opta por galletas que utilicen ingredientes naturales y saludables.
- Bajas en sal: asegúrate de que las galletas sean bajas en sodio o completamente libres de sal añadida. El exceso de sal es perjudicial para la salud renal del bebé.
- Textura suave: las galletas deben ser suaves para que el bebé las pueda triturar fácilmente con las encías. Aunque en esta receta pueden mojarse con un poco de agua o leche, siempre es bueno elegir galletas que puedan deshacerse fácilmente en la boca del bebé.
- Que contengan fibra: elige galletas con ingredientes integrales, como la avena, el trigo integral, la cebada integral, etc. Estos son ricos en fibra y ayudan en la digestión.
- Sin aditivos: es recomendable que las galletas estén elaboradas con ingredientes simples como avena, harina integral, frutas deshidratadas y no contengan aditivos artificiales ni conservantes.
En este artículo te explicamos Cómo hacer galletas para bebés de 6 meses.

Beneficios de la papilla de frutas y galletas para bebés
La combinación de frutas y galletas en una papilla ofrece una serie de beneficios para la salud del bebé, entre estos:
- Aporta nutrientes: las frutas son ricas en vitaminas (como la vitamina C), minerales y antioxidantes, que ayudan al desarrollo corporal y cognitivo del bebé. Asimismo, fortalecen su sistema inmunológico.
- Son de fácil digestión: las papillas de frutas son fáciles de digerir, lo que las hace adecuadas para los bebés en las primeras etapas de su alimentación complementaria.
- Mantiene al bebé hidratado: la mayoría de las frutas, como la sandía, la manzana o la pera, tienen un alto contenido de agua, favoreciendo la hidratación del bebé.
- Estimula la masticación: aunque las papillas son suaves, el bebé puede comenzar a practicar movimientos con la mandíbula, además de experimentar con diferentes texturas y sabores.
- Aporta energía: las galletas integrales o de avena son una buena opción para combinar con la papilla. Estas aportan carbohidratos complejos que proporcionan energía y favorecen el desarrollo físico y cerebral del bebé.
- Ayuda a prevenir el estreñimiento: cuando comienza la alimentación complementaria es común el estreñimiento temporal del bebé. Las frutas contienen fibra y agua, lo que ayuda a regular su sistema digestivo y favorece el tránsito intestinal saludable.
- Desarrollo de gustos saludables: introducir papillas de frutas de manera temprana puede ayudar a que el bebé desarrolle una preferencia por los sabores naturales y saludables, fomentando así buenos hábitos alimenticios en el futuro.
Receta de papilla de frutas y galletas para bebés
Preparar una papilla de frutas y galletas para tu bebé es bastante fácil y rápido. Lo mejor es que puedes ofrecerlas como desayunos o meriendas. Veamos el paso a paso de su preparación:
Ingredientes:
- 1/2 plátano maduro
- 1/4 de manzana (o pera si el bebé está estreñido), pelada y picada.
- 1 galleta para bebé (aunque suelen utilizarse galletas tipo María, puedes elegir una galleta de avena o integral, sin azúcar añadida).
- Agua, jugo de naranja o leche materna (opcional, para ajustar la textura).
Pasos a seguir:
- Prepara las frutas: pela el plátano y la manzana (o la fruta de tu preferencia) y córtalas en trozos pequeños.
- Cocina la fruta (opcional): si prefieres que las frutas estén cocidas (como las peras y manzanas), puedes ponerlas en una pequeña olla con un poco de agua y cocinarlas hasta que estén suaves. También puedes usarlas crudas si las frutas que elegiste son fáciles de triturar.
- Tritura las frutas: coloca las frutas en un bol y usa un tenedor o una batidora para triturarlas hasta obtener un puré suave. Si la mezcla está muy espesa, puedes añadir un poco de agua o leche materna para aligerarla.
- Añade la galleta: rompe la galleta en trozos pequeños y mézclala con el puré de frutas. Si lo prefieres, puedes mojar la galleta con un poco de agua, jugo de naranja o leche antes de añadirla al puré para que se disuelva mejor.
- Servir: sirve la papilla en un plato adecuado para bebés y asegúrate de que la temperatura sea adecuada.
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Recomendaciones antes de ofrecer papilla de frutas y galletas a tu bebé
Aunque las papillas suelen ser bien aceptadas y digeridas por los bebés, toma en cuenta estas recomendaciones para prevenir cualquier malestar.
- Asegúrate de que las frutas estén maduras, ya que son más fáciles de digerir para los bebés. Agrega en el plato unos 100 gramos aproximadamente de frutas en bebés de 7 u 8 meses.
- Siempre prueba la papilla antes de ofrecérsela a tu bebé para asegurarte de que la textura es adecuada para su capacidad de masticar y tragar.
- Si tu bebé es alérgico a algún tipo de fruta, evita utilizarla en la receta y consulta con su pediatra antes de introducir nuevos alimentos o combinarlos.
Consejos para preparar papilla de frutas y galletas de forma segura
Aunque la papilla de frutas y galletas es un alimento nutritivo y fácil de masticar y digerir, es necesario tener en cuenta algunas recomendaciones para hacerlas una comida segura, entre estas:
- Introduce los alimentos de forma gradual: cuando introduzcas un nuevo alimento, como las galletas o una nueva fruta, hazlo de forma gradual. Esto permitirá que observes si hay alguna reacción alérgica o intolerancia.
- Lava muy bien las frutas: mantén una buena higiene al preparar la papilla, lavando bien las manos, los utensilios y las frutas antes de utilizarlas.
- Evita el riesgo de asfixia: asegúrate de que las galletas estén bien trituradas y se disuelvan por completo en la papilla para evitar que el bebé se atragante. Las piezas grandes de galleta pueden representar un riesgo de asfixia.
- Ofrécela con la temperatura adecuada: antes de ofrecer la papilla al bebé, asegúrate de que no esté demasiado caliente (en caso de que las frutas sean cocidas).
- No sustituyas la papilla por una comida completa: recuerda que la papilla de frutas y galletas no debe sustituir las comidas principales del bebé, solo es un complemento.
La papilla de frutas y galletas es una receta que puede formar parte de la dieta de tu bebé a partir de los 7 meses. Aporta vitaminas, minerales, fibra y energía, y es una excelente manera de introducir nuevas texturas y sabores. Para asegurar sus beneficios es necesario elegir frutas frescas y galletas adecuadas, sin azúcares añadidos. Si sigues las recomendaciones antes mencionadas esta receta será ideal, saludable, segura y bien aceptada por tu bebé.
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- Academia americana de pediatría (2022) La transición del bebé a los alimentos sólidos. https://www.healthychildren.org/Spanish/ages-stages/baby/feeding-nutrition/Paginas/starting-solid-foods.aspx
- Academia española de nutrición y dietética (2023) Tengo un bebé, ¿cómo incorporo los alimentos durante el primer año?. https://www.academianutricionydietetica.org/alimentacion-infantil/introducir-alimentos-bebe/
- Stanford Medicine. Children’s Health. (2024) Guía de alimentación para el primer año. https://www.stanfordchildrens.org/es/topic/default?id=feeding-guide-for-the-first-year-90-P05318