¿Se puede tomar cariban en el embarazo?

El Cariban es un fármaco que se indica para el tratamiento sintomático de las náuseas y vómitos del embarazo cuando no logran reducirse con otras intervenciones. Está compuesto por la doxilamina, un antihistamínico de primera generación, combinado con la piridoxina, que es la vitamina B6.

Estudios epidemiológicos y metaanálisis han demostrado que este fármaco no aumenta el riesgo de malformaciones fetales u otros problemas en la embarazada, por ello se considera seguro en esta etapa. Por lo tanto, en la mayoría de casos sí se puede consumir durante el embarazo.

Recuerda que el tratamiento con Cariban es solo una opción cuando los remedios naturales no parecen aliviar estos síntomas. Además, debe consumirse únicamente bajo indicación médica después de que el especialista evalúe si es conveniente su consumo en cada caso.

Cuándo no tomar Cariban en el embarazo

Ahora bien, se debe tener en cuenta que existen algunas condiciones donde el Cariban no debe ser utilizado durante el embarazo, entre estas:

• Si la gestante es alérgica a la doxilamina o piridoxina.
• Tener hipersensibilidad a otro antihistamínico del grupo H1.
• Si estás consumiendo otros fármacos depresores del Sistema Nervioso Central.
• Si se sufre de porfirias, un tipo de trastorno ocasionado por un déficit de las enzimas que intervienen en la biosíntesis del grupo hemo, componente de la hemoglobina.

De igual modo, el médico deberá evaluar previamente la conveniencia de este tratamiento en condiciones como glaucoma, asma, fotosensibilidad, epilepsia, enfermedades cardiovasculares, intestinales, de hígado o de riñón, hipertiroidismo, y si la embarazada está consumiendo otros fármacos. En este artículo te explicamos cuáles son las Principales enfermedades en el embarazo.

El Cariban es un medicamento antiemético y antináuseas, es decir, trata los vómitos y alivia las náuseas. Por ello es el tratamiento de elección cuando estos síntomas afectan el bienestar de la embarazada. Alrededor del 80% de las embarazadas experimentan estos malestares gastrointestinales, generalmente ocasionados por el aumento exponencial de la hormona Gonadotropina Coriónica Humana (hCG).

Estos síntomas suelen remitir por si solos a partir de la semana 12 de gestación, aunque en algunas gestantes pueden perdurar hasta el final del embarazo. Por otro lado, entre el 1 y 2% de las embarazadas pueden desarrollar una condición llamada Hiperémesis Gravídica, caracterizada por náuseas intensas y vómitos constantes que pueden traer graves consecuencias en la gestante.

Aunque el Cariban aún no ha sido estudiado en los casos de Hiperémesis gravídica, muchas gestantes manifiestan alivio de los síntomas tras su consumo. Si tienes dudas al respecto puedes consultar el artículo Estoy embarazada y vomito todo lo que como, ¿es normal?

Tu especialista indicará la forma adecuada de tomar Cariban en el embarazo teniendo en cuenta factores como la intensidad, la frecuencia y el momento del día en el que aparecen las náuseas. Por lo general, cuando las náuseas son matutinas se debe consumir dos cápsulas por la noche, antes de irte dormir.

Por otro lado, si las náuseas no cesan y además perduran durante el día, el médico puede indicar hasta 4 cápsulas diarias de Cariban, una por la mañana, otra a media tarde y dos antes de acostarse. Todo depende de las características de estos síntomas en la gestante.

Otra precaución que se debe tener en cuenta al consumirlo si el malestar no remite es que ir aumentando gradualmente la dosis, dando alrededor de dos días de margen. Esto se debe a que el efecto de este fármaco no es inmediato y puede tardar varios días en aliviar los síntomas.

Aunque el Cariban es un fármaco seguro en esta etapa, es posible que surjan algunos efectos secundarios tras su consumo, entre los que destacan:

• Efectos secundarios frecuentes: somnolencia los primeros días de su consumo, estreñimiento, visión borrosa, sequedad en la boca, retención urinaria o aumento de la secreción bronquial.
• Efectos secundarios poco frecuentes: edema (acumulación de líquidos en los tobillos y pies), sensación de debilidad, hipotensión ortostática (disminución de la presión arterial cuando se cambia de postura), náuseas, vómitos y diarreas, erupciones en la piel, diplopía (visión doble) o tinnitus (zumbido en los oídos). En el caso de presentar alguna de estas manifestaciones adversas es necesario que acudas a tu médico para que reevalúe tu caso y lleve a cabo un análisis de los riesgos y beneficios de su consumo.

En cualquier caso, es importante tener en cuenta que el consumo de fármacos durante la gestación es un tema que no se debe tomar a la ligera. Por ello, si aparecen síntomas como las náuseas y vómitos es necesario consultarlo con tu especialista para tratar de aliviarlos de manera natural. Si estos efectos no disminuyen después probar estos remedios, el médico puede indicar el tratamiento farmacológico con Cariban, un medicamento que se considera compatible con el embarazo.

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