¿Las relaciones sexuales adelantan el parto?

La creencia de que las relaciones sexuales inducen el parto se fundamenta en que, con el orgasmo, las mujeres experimentan contracciones uterinas, lo que estimula la dilatación del cuello uterino. Además, el semen está constituido en parte por prostaglandinas, una hormona utilizada para estimular el parto de forma artificial, y es probable que también pueda provocar contracciones. En la actualidad, estas afirmaciones están siendo estudiadas, puesto que hay muchas dudas al respecto.

Una investigación científica demostró que las mujeres que habían tenido relaciones sexuales en las últimas semanas tenían síntomas, o condiciones similares, a las mujeres que no habían tenido relaciones sexuales. Entonces, ¿qué pasa si tengo relaciones y me dan contracciones? Las que se presentan en las relaciones íntimas son temporales e inofensivas, pero cuando son continuas hacen que el cuello uterino se dilate. Aun así, se requiere que las contracciones sean muy constantes para provocar el parto.

En cuanto a las prostaglandinas presentes en el semen, pueden producir contracciones, aunque no con la misma intensidad. Las prostaglandinas sintéticas que se utilizan médicamente para favorecer las contracciones son mucho más concentradas y directas, por lo tanto más potentes.

En definitiva, el estudio concluyó que las relaciones sexuales no aceleran el trabajo de parto, sino que inducen algunas contracciones y pueden ayudar a inducirlo cuando una mujer está en los últimos días de su embarazo, pero el efecto no es tan inmediato.

Como ya hemos mencionado, las relaciones sexuales no promueven el parto de forma drástica e inmediata, pero es normal preguntarse si es posible tener relaciones sexuales durante el embarazo, si dañan al feto o es peligroso practicarlas. Hay parejas que mantienen relaciones sexuales durante los últimos días del embarazo y no pasa nada. De hecho, en este artículo encontrarás información sobre las posturas para tener relaciones durante el tercer trimestre de embarazo.

El cuello uterino está completamente cubierto por una membrana que lo protege de infecciones y para que los espermatozoides no puedan entrar. Además, independientemente de la longitud del pene, este no puede llegar a tocar al feto y no pasa por el cuello uterino.

Normalmente, si mantienes relaciones cuando se acerca la fecha de parto, estas no afectan al bebé, pero a veces no es aconsejable tenerlas. Veamos en qué casos es mejor no tener relaciones antes del parto:

• Si el embarazo es de alto riesgo.
• Si existe una condición médica que lo impide.
• Si se han roto aguas, porque el riesgo de infección aumenta.

Qué pasa si tengo relaciones antes del parto

Es muy probable que las relaciones sexuales aceleren la fecha de parto, debido a que los espermatozoides están compuestos de prostaglandinas, unas hormonas que también se utilizan artificialmente para inducir el parto. Además, las relaciones sexuales estimulan la producción de oxitocina, lo que tiene un efecto muy positivo en el desarrollo del embarazo y el parto.

Además, mantener relaciones sexuales antes del parte facilita la recuperación tras dar a luz, debido a que los músculos que forman parte del suelo pélvico se ejercitan y se fortalecen. Si quieres ejercitarlo más, en este artículo, te proponemos ejercicios de suelo pélvico para el embarazo.

La satisfacción física y emocional también es importante en el proceso de parto, tanto en la madre como en el feto. Los niños nacidos de mujeres que tuvieron relaciones sexuales regulares durante el parto estaban más seguros y tranquilos.

Hay estudios que sugieren que las relaciones sexuales vaginales durante el embarazo no están asociadas con riesgos de parto prematuro o adelantos en la fecha de parto, pero la última palabra siempre la tendrán los profesionales sanitarios.

Es posible que mantener relaciones sexuales al final del embarazo pueda desencadenar contracciones de Braxton Hicks, o contracciones leves, que suelen aparecer hacia el final del embarazo. A pesar de que estas contracciones no provocan el trabajo de parto, pero pueden acelerar el proceso de parto.

Además, en esta etapa el útero es más sensible a la acción de la oxitocina, una hormona que se produce naturalmente en las mujeres cuando están excitadas. Además, es responsable de mantener el buen tono del útero, por lo que es usada por los médicos para inducir el parto. Así pues, no es contradictorio tener relaciones íntimas para ayudar a que esto suceda.

En definitiva, si tienes relaciones y esto provoca el inicio del trabajo de parto, ¡no te preocupes!. Ante todo, lo más adecuado es que acudas al médico de inmediato para asegurarte de que todo va bien.

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