¿El sangrado después de tener relaciones puede ser embarazo?

¿Es normal sangrar al tener relaciones? El sangrado vaginal después de las relaciones sexuales puede producirse por alguno de los siguientes problemas:

• Cuello uterino inflamado: puede ser una dolencia persistente e inofensiva o bien ser la primera señal de la presencia de infecciones de transmisión sexual que requieran un tratamiento adecuado como, por ejemplo, la clamidia o la gonorrea.
• Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP): la enfermedad inflamatoria pélvica o EIP generalmente es consecuencia de una infección de transmisión sexual que no ha sido tratada. Si quieres saber más sobre esta enfermedad, también puedes leer el artículo Enfermedad inflamatoria pélvica: síntomas, causas y tratamiento.
• Sequedad vaginal: la vagina produce su propia lubricación durante el acto sexual para evitar que se seque y la fricción irrite los tejidos que la recubren. No obstante, en algunas circunstancias la lubricación vaginal puede ser escasa, como en la menopausia. Durante esta etapa, los niveles hormonales pueden causar una disminución de la cantidad de secreción vaginal, lo que puede ocasionar dolor y sangrado.
• Tumor en el útero o revestimiento del cuello uterino: los pólipos son tumores de pequeño tamaño que aparecen entre el cuello uterino y la vagina. Generalmente, este tipo de tumores son benignos y pueden extraerse en una cirugía ambulatoria.
• Sangrado uterino causado por la menstruación: justo antes o después de la menstruación es normal experimentar un ligero sangrado después del acto sexual. Este sangrado suele presentarse como una mancha pequeña de sangre.
• Cáncer de órganos reproductores: los cánceres ginecológicos son una enfermedad que afectan principalmente la vagina, el cuello uterino y al útero. Por lo tanto, con el fin de prevenir y detectar el cáncer a tiempo, es importante acudir regularmente al médico para mantener las revisiones ginecológicas y citologías al día.
• Otras causas: el sangrado vaginal después de tener relaciones sexuales también puede ser consecuencia de otros factores como laceraciones o cortes ocasionados por una fuerte fricción durante las relaciones sexuales vigorosas, inflamación del revestimiento o la superficie del cuello uterino o enfermedades de la piel alrededor de la vagina, como por ejemplo la psoriasis.

El embarazo produce cambios en el cuello uterino, por lo que es posible que, en estos casos, se produzca sangrado después del coito. No obstante, sangrar después del coito no es señal directa de embarazo, así que si tienes dudas al respecto deberías considerar hacerte una prueba de embarazo para confirmarlo o descartarlo.

El sangrado de color ligeramente claro que se produce durante o después de las relaciones sexuales en las primeras etapas del embarazo cuando no esperas la menstruación puede ser motivo de preocupación. La explicación de este sangrado se encuentra en el ciclo menstrual normal.

Cuánto dura el sangrado en el embarazo después de tener relaciones

El período ideal para la concepción dura entre 12 y 24 horas. Tras ese periodo de tiempo, los espermatozoides permanecen en los órganos reproductores femeninos hasta cinco días más, por lo que puedes quedarte embarazada en cualquier momento, incluso unos días antes de la ovulación.

A continuación, si el espermatozoide encuentra un óvulo y lo fertiliza comenzará la división celular. Alrededor del sexto día, la membrana que lo recubre se rompe y el óvulo ya estará listo para implantarse en el revestimiento uterino. Por lo tanto, si durante este tiempo mantienes relaciones sexuales es probable que sangres como consecuencia de la implantación y no por el coito propiamente.

Este sangrado generalmente se mantiene por uno o dos días. Si finalmente confirmas que se trata de sangrado de implantación, el embarazo será resultado del acto sexual que mantuviste aproximadamente unos diez días antes y no de ese momento, ya que este proceso tarda varios días.

Cualquier mujer en edad fértil es propensa a sangrar después del coito, no obstante, este sangrado es más preocupante si se ha confirmado que está embarazada o en la etapa postmenopáusica. De cualquier forma, el sangrado abundante después de mantener relaciones sexuales y sin tener la menstruación no se considera normal.

Por este motivo, es conveniente realizar un seguimiento de la frecuencia con la que cambias tu compresa, tampón o copa menstrual para verificar la cantidad de sangre y si hay presencia de coágulos. Si cambias tu toalla sanitaria cada una o dos horas y la cantidad de sangre es abundante, y presentas coágulos de sangre de más de 1 pulgada (2,5 centímetros), lo ideal es acudir al médico o a la sala de emergencias de urgencia.

Por otra parte, es importante que en estos casos te realicen alguna prueba para detectar enfermedades de transmisión sexual para descartar posibles infecciones causadas por otros motivos. Una prueba de VPH o de Papanicolaou, por ejemplo, permitirá obtener una imagen actual y general de estado de tu cuello uterino.

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