Cuando se encaja el bebé, ¿duele?

El encajamiento del bebé no suele causar un dolor significativo, aunque algunas mujeres pueden sentir un leve dolor o molestia en la parte baja del abdomen o en la zona pélvica cuando el bebé se encaja. Pueden experimentar presión adicional en la vejiga, lo que puede aumentar la necesidad de orinar con más frecuencia. Además, pueden notar cambios en la forma de caminar o sentir una sensación de pesadez en la pelvis.

El aumento de presión en la pelvis puede dificulta la movilidad al andar, porque afecta al centro de gravedad del cuerpo y, eso hace que el peso del bebé sea más evidente al moverse. No obstante, solo algunas mujeres experimentan dolor durante este proceso, ya que no todas lo hacen, y la intensidad puede variar en cada embarazo.

Si el bebé encajado se mueve mucho o sientes mucho dolor en la zona, debes tener en cuenta que hay otros factores que pueden estar causando esta molestia. En otras palabras, si cuando se encaja el bebé duele, este dolor no siempre es debido al encajamiento del infante en la vista. Lo mejor en estos es hablar con un profesional sanitario, para que te examine y te brinde la orientación adecuada.

De todas formas, si quieres saber cuáles son los síntomas de bebé encajado, en este artículo, te contamos Cómo saber si el bebé está encajado.

Cuando un bebé está encajado en la pelvis, es común que la madre sienta molestias y presión en la parte baja del abdomen y la pelvis. Concretamente, las zonas dónde duele cuando el bebé está encajado son:

• Zona baja del abdomen: puedes sentir una sensación de presión o pesadez en la parte inferior del vientre. Es común que el bebé encajado ejerza presión sobre la vejiga, lo que puede hacer que sientas la necesidad de orinar con más frecuencia.
• La pelvis y la parte baja de la espalda: puedes experimentar dolores en la zona pélvica y en la parte baja de la espalda, ya que los huesos y los músculos se ajustan para acomodar al bebé encajado. Si sientes un temblor incómodo en la región pélvica, eso puede indicar que el bebé está encajado. Lo sentirás porque su cabeza presiona varios ligamentos de la pelvis. La sensación se hará más fuerte cuando te muevas, pero esta incomodidad durará hasta que el bebé se acostumbre a su nueva posición.
• Las caderas y las ingles: a medida que el bebé se encaja más profundamente en la pelvis, es posible que sientas molestias en las caderas y las ingles. Esto se debe a que los huesos de la pelvis se están expandiendo y abriendo para facilitar el paso del bebé durante el parto. En este artículo verás Cómo aliviar el dolor de cadera en el embarazo.

Ante todo, hay que tener en cuenta que cada mujer puede experimentar sensaciones y molestias diferentes durante el embarazo y el parto. Cuando el bebé ya está encajado las molestias respiratorias disminuyen, debido a que la presión en las costillas y el diafragma es menor. El vientre parecerá significativamente más pequeño que antes.

Sin embargo, si experimentas dolor continuo y regular, o síntomas adicionales, como fiebre, sangrado o pérdida de líquidos, consúltalo con un médico de inmediato.

Si sientes dolor o molestias después de que el bebé se haya encajado, puedes tomar las siguientes medidas para aliviar el malestar:

• Cambiar de posición: cambia de postura hasta que encuentras aquella con la que te sientas cómoda. Puedes probar a caminar o sentarte en una pelota de ejercicios, entre otras. Esto puede proporcionar un ligero alivio de la presión sobre la pelvis y disminuir el dolor.
• Aplicar calor o frío: para aliviar el dolor, envuelve una bolsa de hielo o una compresa caliente en una toalla y colócala sobre la zona pélvica de 15 a 20 minutos. Recuerda que puedes aplicar calor o frío en el área que te molestes.
• Hacer estiramientos y ejercicio físico: puede ayudar a liberar la tensión en la pelvis y la espalda baja. Habla con tu médico sobre qué ejercicios te recomienda realizar. Actualmente, existen muchas opciones, como la natación, caminar, pilates para embarazadas, ejercicios de Kegel, estiramientos de cadera, inclinación pélvica y/o flexión hacia atrás con la ayuda de un apoyo firme o una pelota suiza. Ante todo, evita ejercicios que tengan impacto sobre la presión abdominal.
• Dormir y relajarse: el sueño y la relajación adecuados pueden ayudar a disminuir el dolor y la incomodidad de cuando se encaja el bebé. Trata de relajarte con una posición en la que te sientas cómoda, ya sea sentada o acostada. Práctica
• Probar técnicas de respiración y relajación: la práctica de técnicas de respiración profunda y relajación puede ayudar a reducir la sensación de dolor y a relajar los músculos tensos. Puedes aprender estas técnicas a través de clases de preparación para el parto o consultando con un especialista en técnicas de relajación.

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