¿Vomitar en el embarazo afecta al bebé?

El vómito es una manifestación habitual durante el primer trimestre de embarazo, y aunque es un síntoma molesto, en la mayoría de los embarazos no representa un peligro ni para la madre ni para el bebé. Durante la gestación los vómitos suelen ser de leves a moderados, y con una frecuencia que permite a la madre reponerse después de padecerlos.

Ciertamente, si las náuseas y los vómitos impiden que la gestante se alimente adecuadamente durante unos días, el bebé tomará los nutrientes de las reservas del cuerpo materno para su desarrollo y crecimiento mientras estos síntomas ceden. Además, el esfuerzo que ejercen los músculos abdominales al momento de vomitar tampoco influye en la correcta implantación del bebé.

Ahora bien, vomitar en el embarazo afecta al bebé cuando la gestación desarrolla una condición conocida como hiperémesis gravídica (HG). Esta afección se da en el 2% de las gestantes y se caracteriza por desencadenar náuseas muy intensas y vómitos frecuentes en los primeros meses, que causan pérdida de peso, desequilibrio metabólico y electrolítico, incluso problemas a nivel cardiaco y sistémico.

Las mujeres que padecen esta condición deben llevar un control médico estricto, debido a que en estos casos el vómito puede ser peligroso en el embarazo. Además de afectar la calidad de vida y salud de la gestante, hay riesgo de que el bebé no tenga la cantidad de agua y nutrientes necesarios para desarrollarse correctamente. De no tratarse, la hiperémesis gravídica puede traer consecuencias graves en la madre y el bebé.

Las náuseas y vómitos en el embarazo suelen ser transitorios y muy pocas veces peligrosos. Estos tienden a desaparecer entre las 16 y 20 semanas de gestación, cuando disminuyen los niveles en sangre de hormonas del embarazo, como la Gonadotropina Coriónica Humana.

Mientras se experimenten estos síntomas, es necesario buscar maneras de aliviarlos o, mejor aún, de prevenirlos. Ante la duda de qué tomar para los vómitos en el embarazo, toma nota de los siguientes consejos:

• Consumir jengibre en infusión, caramelos o tabletas puede ser eficaz a la hora de aliviar las náuseas y prevenir los vómitos. Eso sí, antes de su consumo, debes tener la aprobación del médico. En este artículo, te contamos cómo tomar jengibre en el embarazo.
• Comer galletas saladas: una excelente opción para aliviar las náuseas y vómitos en las mañanas es consumir galletas saladas o pan tostado en ayunas.
• Incluir proteínas y carbohidratos de fácil digestión en tu dieta diaria, como pechuga de pollo, salmón, arroz integral, plátanos, avena, huevos.
• Consume Vitamina B6: previene y alivia las náuseas y vómitos. El especialista puede indicarla sola o en conjunto con el medicamento doxilamina. Puedes escoger también alimentos que la contengan, como salmón, nueces, lentejas y plátanos.
• Consume bebidas carbonatadas, como agua con gas.
• Come 5 veces al día y en poca cantidad: tener el estómago vacío favorece los vómitos y sentirse muy llena también puede desencadenarlos.
• Evita el estrés emocional: es mejor no consumir alimentos o exponerte a situaciones que te desencadenen las náuseas y vómitos, como olores específicos o estrés emocional.

Cuando las náuseas al final del embarazo se hacen frecuentes, es probable que el médico recomiende la toma de algún fármaco que ayude a prevenirlos, como el Ondansetron. En todo caso, si este síntoma se intensifica, es necesario consultar al especialista.

Una duda habitual en las gestantes es qué hacer después de vomitar durante el embarazo. A continuación, te damos algunas recomendaciones para después de los vómitos en el embarazo:

• Hidrátate para recuperar los líquidos perdidos: consume agua o bebidas con sales minerales. Otras opciones son tés fríos sin cafeína, zumos de frutas, gelatina en agua, caldos o consomé ligeros. Lo ideal es que consumas al menos 2 litros de agua al día. Si no toleras tomar líquidos en cantidades, prueba con hielo o con sorbos de agua fría.
• Consume alimentos suaves y blandos: es recomendable seguir la dieta BRAT después de vomitar en el embarazo. Sus siglas en ingles hacen referencia a los alimentos que se deben consumir después de cada episodio, como el pan tostado, arroz blanco, puré de manzana y plátanos. También puedes incluir galletas saladas y fideos sin grasa.
• Evitar comer alimentos con olores fuertes: después de vomitar en el embarazo es mejor no ingerir comidas pesadas, grasientas, picantes, procesadas y saladas con olores fuertes. Evita también la cafeína, los lácteos, el alcohol y los refrescos. Esto ayudará a prevenir los vómitos y la irritación de la mucosa gástrica e intestinal.

En definitiva, para determinar si vomitar en el embarazo afecta al bebé, hay que prestar atención a qué tan frecuentes, intensos y prolongados se hacen los vómitos con el pasar de los días. Debes prestar atención a que tan frecuente, intensos y prolongados se hacen los vómitos con el pasar de los días. Si estos causan otros síntomas secundarios, como pérdida de peso, taquicardia y baja de tensión, o se acompañan con otros síntomas como vómitos con sangre, dolor o diarrea, es necesario que lo consultes con el especialista.

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