¿Es normal tener molestias después de una ecografía de embarazo?
El ultrasonido se realiza colocando un poco de gel y un transductor sobre la piel, específicamente en la parte baja del abdomen. El dispositivo utilizado transmitirá ondas de sonido a través de la piel y, finalmente, generará una imagen del cuerpo y de los órganos que se encuentran debajo de la misma. Durante el embarazo, la ecografía es una herramienta muy importante para su seguimiento y control, ya que esta técnica es segura, no invasiva y proporciona información valiosa sobre el desarrollo de su bebé. Sin embargo, algunas mujeres pueden experimentar molestias después de realizarse una ecografía, especialmente una ecografía transvaginal.
En el siguiente artículo de paraBebés te explicamos si es normal tener molestias después de una ecografía de embarazo.
¿Las molestias después de una ecografía transvaginal son normales?
La ecografía también llamada ultrasonido, es una prueba médica segura, inofensiva e indolora que no utiliza radiación. Utiliza ondas sonoras a través de un transductor y un gel adherido directamente a la piel, para crear imágenes del embrión o feto. A pesar de que este procedimiento no causa dolor, es probable que sientas cierta presión cuando la sonda se mueva en la vagina, en el caso de que sea transvaginal.
Por lo tanto, sí, es normal tener algunas molestias leves después de una ecografía de embarazo, tanto abdominal como transvaginal. Las molestias más comunes incluyen:
- Dolor suave en el abdomen o la pelvis.
- Calambres.
- Sangrado leve o manchado.
- Sensibilidad en los senos.
- Molestias vaginales.
No obstante, estas molestias sueles ser temporal y desaparecer por sí solas al cabo de unas horas. La sonda utilizada es curva para adaptarse a la forma de la vagina y el gel colocado en la sonda también ayuda a evitar el dolor.
Para qué sirve realizar una ecografía transvaginal
La ecografía permite determinar el estado del embarazo y el grado de desarrollo intrauterino del feto, estimar la duración del embarazo, el estado de la placenta y el útero y controlar los ovarios. Las computadoras utilizan estas sondas para crear imágenes y capturarlas en tiempo real, mostrando las estructuras y movimientos de los órganos internos del cuerpo.
Se considera muy valiosa, porque permite que los futuros padres conozcan a su bebé por primera vez, al mismo tiempo que el especialista evalúa cómo está el peso, si tiene anomalías fetales o defectos del desarrollo de aparición tardía. Es muy emocionante escuchar los latidos del corazón, ver los primeros movimientos del bebé y con esta herramienta es posible lograrlo.
Por qué tengo molestias después de una ecografía transvaginal
Es normal sentir presión o malestar mientras se inserta la sonda o tubo, pero el procedimiento en sí no debería ser doloroso. Si en algún momento durante el eco sientes un dolor significativo, avisa al ginecólogo de inmediato. Las molestias después de la ecografía transvaginal son más comunes que las de la ecografía abdominal debido a que la sonda se inserta en la vagina para obtener una imagen más precisa del útero y del bebé, por lo que es de esperarse que cause mayor molestia.
Estas molestias son temporales y suelen desaparecer en unas pocas horas. Las molestias después de una ecografía transvaginal pueden ocurrir por las siguientes razones:
- La presión de la sonda en la vagina.
- El roce de la sonda contra el tejido vaginal.
- Contracciones uterinas durante la ecografía.
En algunos casos, el malestar puede ser síntoma de una afección subyacente, como infección vaginal, irritación vaginal, endometriosis o fibromas uterina. Si las molestias son intensas o persistentes, consulta con tu médico.
Cómo afecta la ecografía en el embarazo
Una ecografía es una forma segura y eficaz para el seguimiento del embarazo que no producirá daños al feto. Sin embargo, en algunos casos la ecografía puede provocar lo siguiente:
- Malestar leve.
- Sangrado leve o manchado.
- Contracciones uterinas.
Generalmente, esta es una reacción normal al ultrasonido y no hay nada de qué preocuparse. No obstante, debes preocuparte por las molestias después de una ecografía, cuando experimentes los siguientes eventos:
- Dolor abdominal/ pélvico muy intenso o persistente.
- Sangrado abundante.
- Coágulos de sangre.
- Fiebre. En el siguiente artículo te explicamos Cómo bajar la fiebre en el embarazo
- Secreción vaginal anormal.
- Dificultad para orinar.
Estos pueden ser signos de una complicación del embarazo, como un aborto espontáneo, un embarazo ectópico o una infección. Debe consultar a su médico si tiene alguno de los síntomas mencionados anteriormente.
Qué no hacer antes de una ecografía de embarazo
Antes de una ecografía de embarazo, es importante seguir algunas pautas para asegurar la precisión de los resultados y garantizar la seguridad tanto de la madre como del feto. A continuación te dejamos algunas cosas que generalmente se recomienda evitar antes de una ecografía de embarazo:
- No retengas líquidos en exceso: aunque es necesario tener la vejiga llena para algunas ecografías, no es recomendable retener líquidos en exceso, ya que esto puede dificultar la visualización adecuada.
- No apliques lociones o cremas en el área abdominal: evita aplicar lociones, cremas o aceites en el área abdominal antes de la ecografía, ya que esto puede interferir con la calidad de la imagen.
- No comas alimentos que generen gases en exceso: algunos alimentos pueden provocar gases, lo que puede dificultar la visualización durante la ecografía. Por ello, trata de evitar alimentos que suelan causar gases antes de la cita.
- No lleves joyas o prendas ajustadas: las joyas y prendas ajustadas en la zona abdominal pueden interferir con la colocación adecuada del transductor y afectar la calidad de la imagen.
- No fumes ni consumas cafeína en exceso antes de la cita: la nicotina y la cafeína pueden afectar la frecuencia cardíaca fetal, por lo que es preferible evitar fumar y limitar el consumo de cafeína antes de la ecografía.
- No tomes medicamentos sin consultar al médico: si estás tomando algún medicamento, asegúrate de informar a tu médico antes de la ecografía, ya que algunos pueden tener efectos en el feto. En estos casos, el médico puede ajustar tu medicación según sea necesario.
- No dejes de seguir las indicaciones del médico: si el médico te proporciona instrucciones específicas para prepararte para la ecografía, asegúrate de seguirlas cuidadosamente.
- Utiliza ropa cómoda y holgada y lleva contigo toallitas sanitarias para utilizar en caso de sangrado o manchado leve
Es importante recordar que estas recomendaciones pueden variar según las indicaciones específicas de tu médico y el tipo de ecografía que se realizará. Siempre es mejor consultar con tu profesional de la salud para obtener orientación personalizada.
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