Cómo se siente el cérvix en los primeros días de embarazo

Es normal experimentar cambios en el cérvix durante los primeros días de embarazo. En la primera semana después de la fertilización del óvulo, los niveles de estrógeno y progesterona aumentan, lo que puede hacer que el cuello uterino se sienta suave y levantado.

A medida que avanza el embarazo, el cuello uterino continúa cambiando su estructura y posición en preparación para el parto. Concretamente, los cambios cervicales más comunes al comienzo del embarazo incluyen:

• Textura suave: después de la concepción, a medida que aumentan los niveles de estrógeno y progesterona, el cuello uterino se vuelve suave y más blando al tacto, con una textura similar a los labios vaginales. En este artículo, te explicamos Qué significa tener el cuello del útero blando.
• Posición alta: los cambios hormonales pueden hacer que el cuello uterino crezca ligeramente y se sienta más alto en la vagina.
• Apertura más pequeña: ¿cuándo estás embarazada el cérvix baja? Durante los primeros días de embarazo, la apertura del cérvix comienza a cerrarse, aunque aún se puede sentir su posición alta y blanda.
• Enrojecimiento: algunas mujeres notan que el cuello uterino en el embarazo está ligeramente enrojecido, que presenta pequeñas manchas rojas o erosionadas. Este es un signo de aumento del flujo sanguíneo.
• Aumento de la mucosidad: las secreciones vaginales aumentan y se vuelven más claras y espesas. Esto forma parte de los cambios en la mucosidad cervical.

Estos sutiles cambios en la textura, posición y apariencia del cérvix durante los primeros días de embarazo son totalmente normales.

Los factores que pueden hacer que el cuello uterino se abra fácilmente al principio del embarazo son:

• Cambios hormonales: el aumento de los niveles de estrógeno y progesterona, producidos tras la implantación, relajan los músculos y tejidos del cérvix.
• Relajación cervical: bajo la influencia de estas hormonas, el cuello uterino pierde rigidez y se vuelve más blando, lo cual es necesario para el crecimiento y desarrollo temprano del embrión.
• Aumento del flujo sanguíneo: la progesterona aumenta el flujo sanguíneo al cuello uterino, provocando enrojecimiento y pequeñas erosiones que ablandan el tejido.
• Preparación para el embarazo: el cuello uterino se prepara para recibir un embrión. A través de una pequeña abertura, permite un mayor intercambio de nutrientes en las primeras etapas del embarazo. Este pequeño agujero es normal y necesario para el correcto desarrollo temprano del embrión.
• Relajación: los cambios hormonales relajan y lubrican el tejido cervical, favoreciendo la implantación temprana del embrión.

Existen algunas señales en el cérvix durante los primeros días de embarazo que podrían requerir atención médica. Estas incluyen:

• Sangrado vaginal excesivo: un sangrado similar al período menstrual puede ser un signo de aborto espontáneo.
• Dolor pélvico intenso: si hay un bebé en el útero y notas un dolor muy intenso que se irradia hacia la zona lumbar o la pelvis, puede indicar la presencia de una infección.
• Cuando el cuello uterino está completamente abierto: si el cuello uterino está lo suficientemente abierto como para palparlo, puede producirse un aborto espontáneo.
• Flujo desagradable: un flujo vaginal con olor desagradable que puede indicar una infección.
• Fiebre alta: la temperatura superior a 38 ℃ puede ser la causa.
• Mareos o desmayos: son signos de presión arterial baja y deben controlarse. En este artículo, te explicamos Cuándo empiezan los mareos en el embarazo y cómo son.

En la mayoría de los casos, son cambios menores normales en la estructura, posición o forma del cuello. Sin embargo, si presentas signos de alerta, debes consultar con tu ginecólogo para descartar cualquier problema que pueda amenazar el embarazo.

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