Chichón en la frente que no desaparece: ¿qué puede ser?
Todos los niños y niñas, a lo largo de su infancia, se dan algún que otro golpe en la cabeza, en general, con pocas consecuencias. En muchas ocasiones el resultado de estos golpes es la aparición de un chichón, esa inflamación que se produce rápidamente a consecuencia de la rotura de pequeños vasos sanguíneos de la zona golpeada, lo que hace que se acumule una cantidad de sangre entre el hueso del cráneo y la piel.
En este artículo de paraBebés vamos a ver si los chichones que se producen en la cabeza son peligrosos o no, cuánto tiempo tarda en desaparecer un chichón de la frente de un bebé o un niño, por qué no se va ese chichón pasado un tiempo y qué puede ser ese chichón en la frente si no desaparece.
¿Los chichones en la cabeza son peligrosos?
La peligrosidad de cualquier golpe en la cabeza tiene que ver con la probabilidad del daño que se cause en el cerebro. Afortunadamente, casi el 90% de los golpes que se dan los niños en la cabeza son leves y no van a causar ningún problema, salvo la aparición de los típicos chichones, alguna herida abierta y dolor donde se ha producido el golpe.
No obstante, se recomienda acudir al médico en las siguientes situaciones:
- El niño se queda inconsciente o presenta una somnolencia exagerada.
- Empieza a no hablar bien o se ven alterados sus movimientos al caminar.
- Presenta vómitos y/o intenso dolor de cabeza.
- Irritabilidad.
- Visión borrosa.
En el caso de los bebés menores de 12 meses, la causa más probable por la que aparezca un chichón es por la caída desde un lugar alto como la cuna, la cama, el cambiador, etc., o si ya da sus primeros pasitos, también es muy común que se caiga desde su propia altura, por falta de control en los movimientos. Cuanta menos edad tenga el niño, mayor será el riesgo de padecer lesiones cerebrales.
En niños más mayores, los golpes en el cráneo se relacionan con caídas desde una altura, bicicletas o patines sin llevar protecciones como el casco, por atropellos o accidentes de tráfico.
Cuánto tarda en irse un chichón en la frente
Los chichones suelen desaparecer en unos 10 días aproximadamente, pero podemos hacer que se vaya antes o que no vaya a más siguiendo una serie de pautas:
- Nada más darse el golpe hay que procurar que se desinflame la zona ayudándonos del frío. Para ello, pondremos hielo sobre el área golpeada, siempre cubierto con algo, nunca sobre la piel directamente ya que se pueden provocar quemaduras. Esto le calmará un poco el dolor que sentirá en ese momento y disminuirá la hinchazón del chichón. También sirven las bolsas congeladas de guisantes, etc.
- Utilizar árnica. En el mercado, tanto en farmacias como en grandes superficies venden unas barritas en forma de stick de árnica, especialmente fabricadas para tratar los chichones de los niños.
- Si no dispones de esta barrita, o prefieres utilizar algún remedio casero, también puedes optar por el aceite o crema de lavanda que tiene propiedades antiinflamatorias, así como el perejil machacado con un poquito de mantequilla y aplicado directamente sobre el chichón.
Siempre que exista en el chichón una herida abierta, estas opciones no son válidas, ya que la zona se puede llegar a infectar. Solamente lo podemos hacer sobre golpes sin heridas.
Por qué no desaparece el chichón
El tiempo para que desaparezca el chichón de la cabeza del niño o de la niña va a depender de la velocidad de la que es capaz su organismo de reabsorber esa sangre que se ha quedado acumulada, por lo que hay niños que tardarán más y otros menos tiempo.
Evolución de un chichón normal
Hay que tener paciencia, ya que no suelen desaparecer de un día para otro. Día a día los chichones van evolucionando en su aspecto, poco a poco va bajando la inflamación e irán cambiando su coloración. Vamos a ver los cambios normales de los chichones:
- En el momento que se da el golpe, la piel se vuelve roja y se inflama formando un chichón, que produce dolor si lo tocamos.
- A partir del 2º día hasta el 4º, adquiere una tonalidad morada, con apariencia de moratón. Está menos hinchado que al principio, pero duele al tacto.
- Desde el 5º día hasta el 10º, produce dolor ligero al tacto y presenta una coloración verdosa.
- A partir del 10º día, el chichón ya no está porque no hay inflamación, tampoco dolor, y la zona tiene un tono amarillento justo antes de desaparecer por completo.
Motivos por los que consultar con un especialista
Los padres y madres deberemos observar los cambios que se produzcan en ese chichón, y si sigue el curso antes mencionado no hay de qué preocuparse. Sin embargo, a veces es conveniente que lo revise el pediatra, en los siguientes casos:
- El chichón se agranda, se hace más largo o se vuelve blando y móvil.
- Presenta una zona hundida.
- Si han pasado 20 días o más y el chichón no ha desaparecido y no se han producido cambios. Si un chichón en la frente que no desaparece, puede ser que no se trate de un chichón normal, sino de un chichón encapsulado (que no ha logrado reabsorberse) o un absceso (acumulación de pus).
Si deseas leer más artículos parecidos a Chichón en la frente que no desaparece: ¿qué puede ser?, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Salud infantil.
- Asociación Española de Pediatría. (2012). Golpes en la cabeza. ¿Qué nos debe preocupar?
- Galán Bertrand, L. (2018). Accidentes infantiles.