¿Se puede usar lubricante durante el embarazo?

Por lo general, el uso de lubricantes durante el embarazo se considera seguro, aunque es importante seleccionar productos que estén específicamente etiquetados como seguros para su uso durante el embarazo. Algunos lubricantes pueden contener ingredientes que podrían no ser adecuados durante el embarazo. Es recomendable hablar con tu ginecólogo o matrona, sobre cuál es la mejor manera de disfrutar del sexo durante el embarazo.

Los cambios hormonales durante el embarazo afectan los sistemas del cuerpo y el fluido vaginal que se produce naturalmente, puede verse afectado produciéndose en mayor cantidad o disminuyendo en cantidad. En estos casos, si desea tener relaciones sexuales será incómodo por la baja producción de fluido y la sequedad vaginal.

Se ha demostrado científicamente que las madres que llevan una vida sexual saludable y regular durante el embarazo, mejora tanto su salud como la del bebé. No obstante, si deseas mantener relaciones sexuales durante esta etapa lo más importante es que te sientas cómoda o segura. En este sentido, usar lubricante en el embarazo facilitará las relaciones sin riesgos para el feto.

Normalmente, la vagina produce un líquido lubricante transparente que facilita las relaciones sexuales y reduce la sequedad vaginal. No obstante, durante el embarazo es común experimentar resequedad vaginal como consecuencia de las variaciones hormonales que provocan que el tejido vaginal se encoja y adelgace, generando sequedad e inflamación. Este problema, tratable a cualquier edad, se manifiesta con ardores, malestar, picazón, flujo vaginal anormal y dolor durante el coito.

Los cambios hormonales en el embarazo ocurren rápidamente, provocando molestias como la sequedad vaginal. El tejido vaginal se vuelve menos elástico, volviéndose inestable durante estos meses, y pueden surgir síntomas como picazón, hipersensibilidad, dolor e irritación durante las relaciones sexuales.

En este sentido, los lubricantes diseñados para embarazadas son una solución efectiva para este problema porque proporcionan hidratación y mejoran la lubricación en la zona. Los lubricantes a base de agua son especialmente recomendados y previenen la irritación de los tejidos

Los geles lubricantes son fantásticos para aliviar la sequedad vaginal, especialmente durante la lactancia después del embarazo. Lo ideal es utilizar un lubricante a base de agua para mantener el pH de la piel y mucosas y evitar el riesgo de irritación o infección. Este tipo de han demostrado ser especialmente buenos porque son duraderos, neutros, no representan riesgo de causar irritación y además son fáciles de utilizar

Lo mejor es evitar lubricantes que contengan aditivos, así como los lubricantes domésticos como vaselina o aceite de coco y otros productos que no estén destinados a usarse como lubricantes íntimos o que puedan causar irritación o infección, no solo durante el embarazo, sino en cualquier momento de tu vida.

De igual modo, es recomendable que los lubricantes que utilices hayan sido elaborados a partir de productos orgánicos y a base de aceites vegetales. En el siguiente artículo te explicamos ¿Hasta cuándo se puede tener relaciones estando embarazada?

Como hemos mencionado anteriormente, el uso de lubricantes durante el embarazo, por lo general, es completamente seguro. No obstante, es importante escoger un lubricante que sea compatible con el embarazo y que no cause irritación ni efectos adversos.

A continuación te dejamos algunas consideraciones importantes antes de utilizar cualquier gel lubricante en el embarazo:

• Asegúrate de que estén elaborados con ingredientes seguros: escoge un lubricante que esté libre de ingredientes dañinos y procura utilizar lubricantes a base de agua, ya que son menos propensos a causar irritación y son seguros durante el embarazo.
• Evita lubricantes que contengan espermicidas: este tipo de lubricantes pueden no ser seguros durante el embarazo si se utilizan en grandes cantidades.
• Evita los lubricantes con sabores o fragancias: algunos lubricantes contienen sabores o fragancias que pueden irritar la zona genital, por lo que es aconsejable evitar estos productos en esta etapa.
• Prueba de sensibilidad: antes de probar un lubricante, realiza una pequeña prueba en una parte de la piel para asegurarte de que no haya reacciones adversas.
• Consulta las dudas con tu médico: en caso de duda, es recomendable consultar a tu médico antes de utilizar cualquier nuevo producto durante el embarazo para que pueda proporcionarte orientación personalizada basada en tu situación médica y tus necesidades específicas.

En cualquier caso, no olvides que cada embarazo es único y las necesidades y tolerancias de cada embarazada pueden variar. Por ello, lo mejor es consultar con un profesional de la salud para obtener orientación específica a tu situación.

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