Por qué las mujeres dan a luz acostadas

Dar a luz acostada sobre la espalda o, en terminología médica, en «posición de litotomía», no es la mejor posición para llevar a cabo el trabajo de parto. No obstante, muchas suelen adoptar esta posición por la comodidad que supone estar tumbadas durante el proceso de parto. Además, es la posición más conocida y utilizada desde el siglo XVII.

Concretamente, existe un hecho histórico relacionado con el Rey Luis XIV al que se le atribuye su marcada influencia. Se dice que a este rey le gustaba observar a las mujeres dar a luz, así que ordenó que acostaran a su esposa sobre su espalda para tener una mejor visión de su parto. Según esta historia, se cree que este rey promovió que las mujeres dieran a luz acostadas. A pesar de que no hay documentación que sustente este hecho, a partir de esta época comenzó el auge de esta posición para dar a luz.

Otra de las razones por las que las mujeres adoptan esta posición es porque facilita la intervención del médico o partera en el caso de que se presente alguna emergencia durante el parto. Por lo tanto, es la más recomendada en los centros de salud. En este artículo encontrarás información sobre los diferentes Tipos de parto y sus características.

Imagen: History

Si bien la posición de litotomía es la posición más utilizada y que más facilidad trae al médico para manejar adecuadamente la situación, lo cierto es que no es la mejor opción cuando las contracciones se vuelven muy dolorosas y se desea que el parto avance con rapidez.

Eso sí, cada mujer vive diferente las sensaciones en este proceso, así que es posible que para algunas esta posición sí les resulte más cómoda y relajante. Por el contrario, para otras puede resultar incómoda e intensificar las molestias a la hora de intentar pujar sin ayuda de la gravedad. En todo caso, esta posición, al igual que otras, tiene ventajas y desventajas. A continuación te mostramos cuáles son:

Ventajas de dar a luz acostada

Veamos algunas de las ventajas de dar a luz acostada:

• Menor riesgo de pérdida de sangre durante el parto y hemorragias durante posparto.
• Cuando los partos son largos, esta posición permite que la madre descanse entre contracciones.
• Muchas mujeres afirman que esta posición es la más cómoda durante el trabajo de parto.
• Mayor comodidad y control para el personal sanitario en el momento de atender el parto. Además, facilita la ejecución de maniobras si se producen complicaciones durante el proceso de parto y favorece la rápida intervención en el caso de requerir una cesárea de urgencia.

Desventajas de dar a luz acostada

Por otro lado, se han descrito también algunas desventajas de dar a luz en esta posición, entre las que destacan:

• Reduce alrededor del 20% la apertura de la pelvis, por lo que el bebé tiene menos espacio al momento de su salida al exterior.
• Esta posición comprime los vasos sanguíneos que irrigan el útero, aumentando el riesgo de pérdida del bienestar fetal como consecuencia de la disminución del aporte de oxigeno hacia la placenta. Esto aumenta también las probabilidades de sufrir hipotensión y mareos.
• El parto puede ser más doloroso.
• Incrementa las lesiones perianales y la necesidad de episiotomía.
• Al no estar a favor de la gravedad, el trabajo de parto puede ser más lento.

La Organización Mundial de la salud recomienda que durante el trabajo de parto se aliente a las madres a adoptar las posiciones que ellas deseen, incluso si eso significa dar a luz de pie, en el agua, en cuclillas o sentadas. A continuación te mostramos en detalle cuales son las mejores posturas que se pueden adoptar durante el parto:

• De pie: dar a luz en esta posición o de cuclillas es lo que se conoce como «parto vertical». Esta posición vuelve más eficaces las contracciones uterinas y acelera el descenso del bebé. También disminuye la necesidad de episiotomías y la necesidad de analgesia y de fármacos como la oxitocina para estimular las contracciones.
• Cuclillas: tiene las mismas ventajas que el parto de pie. Aunque la pelvis no es completamente libre en esta posición, su diámetro aumenta al punto que no entorpece la salida del bebé, además hay menos riesgo de lesiones perianales.
• Cuadrupedia o posición a cuatro patas: en esta postura la gravedad no está a favor, sin embargo, no dificulta el parto. Dar a luz en esta postura favorece la oxigenación placentaria y la elasticidad perianal.
• Decúbito lateral: esta postura consiste en colocarse tumbada de lado para aportar más comodidad, disminuir el dolor en la espalda y relajar los músculos perianales.
• Sentada: favorece el descenso del bebé y la progresión por gravedad. Además, mejora la eficacia y dirección de las contracciones uterinas.

Son muchos los factores que pueden influir en la elección de la postura que adquiere la mujer al dar a luz, como la costumbre, el entorno, la preferencia del médico o matrona o la necesidad de una intervención médica. La posición ideal para dar a luz es aquella en la que la mujer se sienta más cómoda, ya sea acostada o de pie. Sin embargo, basándonos en sus ventajas, las posiciones verticales y en cuclillas son las más adecuadas durante el parto.

Conocer las ventajas y desventajas de las diferentes posiciones para dar a luz te aportará herramientas a la hora de afrontar adecuadamente cada etapa del parto, te ayudará a disminuir el dolor, acortará el tiempo de trabajo de parto y disminuirá el riesgo de complicaciones y lesiones perianales.

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