Cuántos días se puede estar con contracciones antes del parto

La duración de las contracciones antes del parto puede variar significativamente de una persona a otra y depender de diferentes factores. Por lo general, las contracciones antes del parto suelen durar entre 30 segundos y un minuto, aunque pueden aumentar hasta dos minutos durante el trabajo de parto. En la hora previa al inicio del trabajo de parto, las contracciones se producen entre 5 y 20 veces más que en la antesala del parto.

Existen algunas fases del trabajo de parto que no son consideradas como trabajo de parto propiamente, pero que aun así pueden ser muy molestas y durar mucho tiempo. Por ello, no es correcto asegurar que ha iniciado el trabajo de parto mientras las contracciones no sean regulares ni de intensidad constante o si el cuello uterino no ha cambiado.

Antes de que comience el parto, una mujer puede experimentar contracciones durante horas o incluso varios días. Estas contracciones no serán frecuentes ni particularmente intensas y debes tratar de mantener la calma porque todavía no ha llegado el momento de ver nacer a tu hijo.

Cómo son las contracciones del parto

Las verdaderas contracciones de parto son regulares, se vuelven más fuertes con el tiempo y pueden durar más, mientras que las contracciones de Braxton Hicks o contracciones falsas suelen ser irregulares y no tan dolorosas, estas son las que sientes como antesala antes de que comience el trabajo de parto activo.

Estas contracciones suelen mostrar el siguiente patrón progresivo:

• Comienzan de forma esporádica y no son regulares al inicio.
• A medida que aumenta el tamaño del cuello uterino, también aumenta la regularidad, la duración y la frecuencia.
• Cuando el trabajo de parto está a punto de comenzar y el cuello uterino está completamente dilatado, pueden durar entre 20 y 60 segundos.

A medida que se acerca el parto, el intervalo entre cada contracción es cada vez más corto y pasa de ser cada 10 minutos a cada minuto. A diferencia de esto, cada contracción dura más durante el parto, con una duración de más de 30-35 segundos en comparación con los 20-25 segundos durante el embarazo. En pocas palabras, las contracciones de parto ocurren con mayor frecuencia y duran más. Aquí encontrarás más información sobre Cómo empiezan las contracciones de parto.

Si las contracciones previas al trabajo de parto duran más de lo previsto es posible que se presenten varios efectos. A continuación te lo explicamos:

• Cansancio y agotamiento: tener contracciones frecuentes y dolorosas durante horas o días puede ser extremadamente agotador. Esto puede tener un impacto negativo en la capacidad de la madre para pujar con éxito, durante el trabajo de parto.
• Dolor excesivo: las contracciones prolongadas pueden causar un dolor insoportable, lo que dificulta que la madre se relaje y se mueva durante el trabajo de parto.
• Deshidratación: si las pérdidas de líquidos de las contracciones frecuentes no se reemplazan adecuadamente puede resultar en deshidratación.
• Infección: si el trabajo de parto dura demasiado, tanto la madre como el bebé corren más riesgo de contraer una infección.
• Distocia de hombros: en caso de que se posponga el parto, existe una mayor probabilidad de que los hombros del bebé se atasquen durante el parto, lo que requiere asistencia médica.
• Cesárea: para garantizar la salud de la madre y del bebé, es posible que se requiera una cesárea si el trabajo de parto no continúa después de un tiempo.

Debes tener en cuenta que cada embarazo es único. Por esta razón, mientras algunas embarazadas experimentan contracciones irregulares durante horas o incluso días antes de que el cuello uterino se abra por completo, otras pueden pasar directamente de contracciones irregulares a contracciones regulares y potentes, en tan solo unas pocas horas.

Para tener saber si el trabajo de parto es inminente debes concentrarte en el patrón de las contracciones. Es probable que si gradualmente se vuelven más frecuentes, prolongados y regulares, especialmente si se acompañan de otros síntomas como ruptura de fuentes. En caso de duda puedes consultar el artículo Cuándo ir al hospital ante las contracciones de parto.

A continuación te mencionamos qué hacer si no paras de tener contracciones antes del parto:

• Habla con tu médico o partera y descríbele la frecuencia y la duración de las contracciones, así como cualquier otro síntoma que pueda estar experimentando. Estos profesionales deberán evaluar tus circunstancias personales y decidir si es necesario visitar el hospital.
• Si tus contracciones son constantes, prolongadas y dolorosas, especialmente si empeoran con el tiempo, puede ser hora de visitar el hospital: allí se evaluará tu progreso para determinar si es hora de romper el agua y comenzar el trabajo de parto.
• Romper aguas: los médicos pueden romper aguas si aún no lo han hecho para acelerar el comienzo del trabajo de parto. Como resultado, se liberan hormonas que intensifican las contracciones.
• Analgésicos: en casos de dolor extremo, los médicos pueden prescribir analgésicos o anestesia epidural.
• Inducción del trabajo de parto: si has tenido contracciones durante un tiempo sin presentar ninguna mejoría, es posible que tu médico te recomiende usar medicamentos u otras técnicas para acelerar el proceso y asegurar que el bebé nazca de forma segura.

Es probable que el trabajo de parto esté a punto de comenzar, a medida que las contracciones se hacen más fuertes y el espacio entre ellas se acorta, especialmente si se le unen otros síntomas como la ruptura de aguas. Sin embargo, cuando las contracciones antes del parto duran demasiado tiempo es fundamental buscar atención médica. El mejor curso de acción se podrá decidir después de que un profesional médico evalúe la circunstancia.

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