Juegos de persecución: qué son, objetivos y tipos
Una de las prioridades del niño o la niña desde que va tomando contacto con su entorno es el juego. Al principio se caracteriza por ser muy primitivo, en solitario y no atender a ninguna norma. Conforme va creciendo y madurando, va disfrutando y buscando la compañía de su grupo de iguales para compartir juegos e ir asumiendo, progresivamente, normas y reglas.
Los juegos en grupo resultan muy divertidos para los niños, pero es que además a través de ellos, aprenden valiosos conceptos que les acompañarán el resto de su vida como la solidaridad, el respeto, la empatía o el trabajo en equipo. En este artículo de paraBebés, os hablamos sobre los juegos de persecución: qué son, objetivos y tipos.
Qué son los juegos de persecución
¿Qué son los juegos de persecución? Actividades tradicionales muy populares entre los niños y las niñas. De hecho, los acogen con gran entusiasmo desde que los conocen y aprenden su funcionamiento. Suelen desarrollarse en muchos patios de colegio o fiestas infantiles. En este artículo, te proponemos juegos para fiestas infantiles originales.
Es preferible desarrollarlos en grupo y en lugares de exterior, pues suelen requerir bastante espacio. Normalmente siempre hay un participante que persigue y otro que al ser capturado, tocado o agarrado, le tocará perseguir o pillar. Hay múltiples variedades de este tipo de juegos que veremos más adelante.
Objetivos de los juegos de persecución
Cada juego de persecución posee una finalidad diferente, pero en líneas generales, los objetivos de los juegos de persecución son:
- Socializar con el grupo de iguales: el juego es el mejor canal de socialización e interacción para los menores. Les permite relacionarse, conocerse y aprender los unos de los otros A través del juego, forjan lazos afectivos y relaciones de amistad que pueden ser muy duraderas.
- Respetar y entender normas: aunque las reglas de un juego puedan ser sencillas, los cierto es que hay que aceptarlas y asumirlas. Esto ayudará a los niños y niñas a entender y respetar mejor las normas de convivencia y a responder mejor ante los conflictos.
- Disfrutar: el juego es disfrute y así es como lo tienen que vivenciar los pequeños y pequeñas. La principal tarea de los menores debe ser disfrutar. Las actividades lúdicas, les permiten ir canalizando emociones y sentimientos. Descubre, en este artículo, cómo gestionar las emociones.
- Adquirir autonomía: otro de los objetivos de los juegos de persecución es que ayudan a desarrollar la autonomía e incluso favorecen la toma de decisiones en el menor.
Sigue leyendo para descubrir distintos ejemplos de juegos de persecución.
Tipos de juegos de persecución
Hay muchos tipos de juegos de persecución, como el pilla pilla, donde si el jugador es tocado por el que se persigue, comienza a llevarla él o ella. Por ejemplo, en el escondite los jugadores se esconden, no deben ser encontrados y pueden ser salvados si no les pillan. Por otro lado, en los juegos de pistas puedes refugiarte en un espacio denominado "casa" para estar a salvo.
A continuación, os proponemos diferentes tipos de juegos de persecución para niños:
- Tiente: un jugador persigue al resto con el fin de poder tocar a alguno de los jugadores. Si lo consigue, deja de pillar él o ella y la llevará el jugador/a que haya sido tocado.
- Abrazados: un de los ejemplos de juegos de persecución. Todos los jugadores corren por el espacio y el que persigue debe tratar de capturar a alguno. Para evitar ser cogidos, los jugadores tienen que abrazarse entre ellos y quedarán automáticamente salvados.
- Stop: todos los jugadores corren. Cuando el que persigue a los demás captura a algún jugador, este puede decir "stop", abrir sus piernas y que otro jugador pase por debajo para ser salvado.
- Pies en alto: para que los participantes de este juego no sean capturados, no pueden tener los pies en el suelo. Para ello, pueden dar salto, levantar los pies exageradamente si quieren desplazarse o tumbarse en el suelo con los pies en alto.
- Los caballos: en esta ocasión, para que los jugadores no sean atrapados por quien persigue, cuando está próximo, un participante debe subirse a caballito de otro y de esta forma se podrán salvarán.
- Tocado por el balón: el que persigue al grupo lleva un balón que tiene que lanzar con el fin de dar a algún participante. Sin embargo, si el jugador al que le lanzan el balón lo agarra en el aire sin que éste haya botado, se salva. Entonces, sigue persiguiendo el mismo/a jugador/a hasta que logre dar a alguien.
- Perrito "guau": todos los participantes corren. Cuando temen ser agarrados por el que pilla, deben ponerse a cuatro patas, ladrar y un jugador/a saltar por encima. Es un juego que admite más variaciones, pero que es muy característico en las clases de educación física.
- La mancha: si un jugador/a es tocado por el que persigue, comienza a llevarla él o ella. El objetivo es tratar de capturar a más jugadores, pero tiene que desplazarse mientras con una de sus manos va tocando la zona donde le dieron al capturarle. La gracia y la dificultad del juego consiste en dar en alguna zona del cuerpo que repercuta a la hora de desplazarse, como por ejemplo en un tobillo.
- La cesta: un juego cooperativo en el que dos alumnos persiguen a los alumnos que están libres. Siempre deberá haber dos en esta condición. Así cuando un perseguido quiera salvarse correrá hacia una pareja y tomará la mano de uno de ellos, lo que automáticamente le convertirá en el jugador libre que puede ser capturado. Cuando alguno que esté libre sea capturado, se cambian los papeles
- Polis y cacos: dos equipos, polis y cacos. Los polis cuentan sin mirar mientras los cacos se esconden. Los polis tienen que ir a buscar y capturar a los cacos. Si son pillados, los llevan a una cárcel, donde podrán ser salvados con la mano por sus compañeros cacos.
En este artículo, encontrarás más juegos cooperativos divertidos para niños.
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