¿Te gustaría que tu hijo fuese bilingüe en inglés?

¿Te gustaría que tu hijo fuese bilingüe en inglés?

A muchas de nosotras nos hubiera gustado dedicarle más tiempo y esfuerzo al estudio de un segundo idioma cuando éramos más jóvenes y teníamos menos responsabilidades.

Si te sientes identificada con esta premisa, seguramente tengas intenciones de proporcionarle a tu hijo clases de inglés, a partir de una edad temprana, para de esa forma garantizar su bilingüismo. ¿Te gustaría que tu hijo fuese bilingüe en inglés? En este artículo de paraBebés, te contamos los mejores consejos para conseguirlo.

Empieza cuanto antes

Está comprobado que los niños y las niñas aprenden con más facilidad que los adultos, y que cuanto más pequeños/as sean al momento de comenzar, mejores resultados obtendrán a futuro. Sin dudas, para lograr alcanzar un manejo del idioma que permita no solo denominarse sino, más importante aún, sentirse bilingüe, es necesario incorporar una gran cantidad de conceptos y reglas gramaticales y ser capaz de expresarse con total fluidez y naturalidad. La única forma de garantizar este nivel de conocimiento, es dedicar una importante cantidad de horas al estudio del idioma.

Elige un buen método

Existen muchas escuelas con una oferta educativa bilingüe que garantizan que el niño reciba todo lo que necesita para forjar los cimientos del inglés desde pequeño. En ocasiones el problema son los costos asociados a este tipo de escolaridad. Otra opción sin duda más económica pero igual de eficiente son las clases de inglés online para niños. Más allá del precio, otra ventaja es que, al ser clases particulares, el foco estará puesto en las necesidades específicas de nuestro hijo.

Incluye el inglés en el día a dia

Sea cual sea el formato de educación elegido, existen ciertas actitudes y acciones que podemos llevar a cabo para incrementar sobre todo la fluidez y la confianza de nuestros hijos al expresarse en inglés. Por ejemplo, preguntarles a nuestros hijos acerca de los temas que están trabajando en clase, es un excelente hábito. La clave está en hacerlo en forma distendida, no a modo de examen sino demostrando verdadero interés por lo que el niño recuerda. En ocasiones apenas recordarán el concepto principal visto durante la lección, pero también puede ocurrir que se muestren muy entusiasmados en compartirnos lo que han aprendido si se trata de una materia que particularmente les provoca curiosidad, o si está relacionada con una actividad que disfrutan.

Juega con el inglés y los roles

Inclusive a medida que los niños van creciendo, una opción interesante puede ser proponer un juego de cambio de roles donde, por ejemplo, el padre ocuparía el lugar del niño y el niño el del profesor para, de esta forma, pedirle que nos enseñe lo aprendido. El hecho de sentir que el vínculo con los contenidos recientemente adquiridos no termina cuando finaliza la clase, garantiza que la información se procese de otra forma, con mejor sustento.

Permíteles aprender y equivocarse en el camino

Otro punto fundamental para enriquecer la confianza a la hora de hablar inglés es permitirles equivocarse. Una de las principales trabas que tenemos los adultos al momento de aprender cualquier cosa nueva, es el miedo a fallar y quedar en ridículo. Los/as niños/as pequeños/as no cuentan con este mecanismo, por el contrario, es algo que aprenden de nosotros los adultos. Por lo tanto, es fundamental transmitirles tranquilidad. Lo ideal sería que comprendan que al aprender algo nuevo, no solo es normal sino además necesario equivocarse porque de hecho es así cómo se logra aprender.

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