Síndrome de Raynaud en el pezón: qué es, síntomas, causas y tratamiento

Este fenómeno del pezón fue descrito por primera vez por Raynaud en el año 1970. Es bastante frecuente durante la lactancia materna y una de las principales razones de abandono precoz de la misma.

Concretamente, el síndrome de Raynaud es una condición descrita como isquemia vascular periférica reversible, es decir, falta de oxígeno en zonas determinadas del cuerpo que puede predisponer a episodios de vasoespasmos, generalmente producidos por frío o emociones intensas.

Las primeras señales que evidencian la isquemia son la palidez, la sensación de hormigueo y dolor en la zona afectada, que regularmente aparece en los dedos de las manos, de los pies y la nariz. Aun así también puede producirse una isquemia del pezón, en el que el dolor afecta a los dos pezones, pero no siempre al mismo tiempo.

Generalmente, el síndrome de Raynaud en el pezón se produce después del parto, cuando se está iniciando con el amamantamiento. Las mujeres que lo han padecido, lo describen como un dolor intenso, molesto y punzante que aumenta cuando se exponen al frío.

Ante la presencia del síndrome de Raynaud en el pezón, se observan cambios en su coloración, con variaciones de tonos durante minutos e incluso horas. Al principio, las madres notan que el color cambia de pálido a cianótico (azul), para luego volver a su estado natural (rosado). La explicación es que al principio la sangre deja de fluir hacia esa zona, pero luego el espasmo se resuelve y la sangre fluye con normalidad.

Otras de los principales síntomas del síndrome de Raynaud en el pezón son:

• Pueden aparecer grietas, úlceras y ampollas.
• Dolor intenso de tipo punzante en el pezón.
• Entumecimiento.
• Alteraciones sensitivas, es decir, los pezones se vuelven más sensibles al tacto.

Ante la isquemia del pezón, comúnmente el dolor se siente en los dos pezones, pero no de forma simultánea. El factor común es que se produce después de amamantar o si la madre ha estado expuesta al frío.

Las causas del síndrome Raynaud en el pezón no se conocen con exactitud. Se ha descrito como un vasoespasmo (oclusión) de las arterias que conducen la sangre hacia los pezones, lo que produce un menor aporte de oxígeno.

Aun así, existen factores precipitantes que pueden causar el síndrome de Raynaud en la lactancia. Veamos cuáles:

• Madres con mala circulación sanguínea.
• Uso y abuso de sustancias tóxicas.
• Exceso de cafeína.
• Estrés emocional.
• Mal agarre del pezón. En este artículo encontrarás las claves sobre cómo amamantar a un bebé correctamente.
• Exposición extrema al frío.
• Raras veces se relaciona con antecedentes de enfermedades endocrinas y reumatológicas.

El tratamiento de la isquemia del pezón consiste en disminuir el espasmo (vasoconstricción) de la zona afectada y promover la vasodilatación, con el objetivo de que los vasos sanguíneos se abran y el flujo sanguíneo sea efectivo. A continuación, te mostramos distintas recomendaciones para curar el síndrome de Raynaud en el pezón.

Medidas no farmacológicas

Descubre qué se recomienda para tratar el síndrome de Raynaud sin fármacos:

• No exponerse al frío o cambios de temperatura bruscos.
• La lactancia materna debe darse en ambientes cálidos y tranquilos.
• La ropa debe ser la adecuada, que mantenga la temperatura corporal.
• No abusar de las drogas, cigarrillos o alcohol.
• Evitar consumir sustancias que predisponen a la vasoconstricción como, por ejemplo, la cafeína.
• Tener cuidado con las caídas o golpes en los pezones.
• Aplicar calor local o tomar duchas de agua tibia.
• Participar en actividades recreativas y evitar el estrés.
• Mantener la higiene corporal y la integridad de la piel.
• Mantenerse hidratada.
• Practicar ejercicios aeróbicos, que no ameriten tanto esfuerzo.
• Ingerir vitaminas del grupo B6 y aceite de Onagra, junto con otros suplementos como magnesio y calcio (bajo prescripción médica).
• Evitar los episodios de estrés: son predisponentes al síndrome de Raynaud. Por este motivo, es importante disminuir los miedos, las dudas y lograr un ambiente tranquilo.

Generalmente, al aplicar estas medidas, las madres presentan una mejoría significativa, sobre todo cuando controlan el estrés y la ansiedad postparto. En caso contrario, los especialistas proceden con otras terapias.

Tratamiento farmacológico

¿Cómo curar la isquemia del pezón? A veces esta afección requiere de tratamiento farmacológico. Descubre cuál se recomienda en estos casos.

• Nifedipino: es el medicamento de elección porque ha demostrado ser eficaz y seguro durante la lactancia, por su escasa eliminación en la leche. Actúa bloqueando los canales de calcio en el músculo liso, favorece la vasodilatación y reduce los síntomas de espasmo. Los especialistas indican 30 mg diarios durante dos semanas bajo supervisión estricta de los efectos.
• Paracetamol o ibuprofeno: son efectivos para reducir el dolor.

Estos fármacos pueden producir algunas reacciones adversas como dolor de cabeza, palpitaciones, hinchazón y enrojecimiento del rostro.

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