Si el bebé ya está encajado, ¿cuánto falta para el parto?

Se considera que el bebé se ha encajado cuando la parte más grande de su cabeza entra y permanece dentro de la cavidad pélvica de la madre. Se denomina “encajamiento” y también “aligeramiento” indistintamente, debido a las sensaciones de ligereza que produce en la madre.

La parte del cuerpo que se encaja, en la mayoría de los casos es la cabeza, al estar el bebé en posición cefálica. Pero a veces los bebés se encuentran en posición podálica, es decir, que lo que se encaja son las nalgas, ya que tiene la cabeza hacia arriba y el trasero hacia abajo.

La semana en la que se produzca el encajamiento va a depender de variables como: la forma de la pelvis que tenga la madre (más estrecha, más ancha, etc.), el tamaño del feto, si es primeriza o no, si es una mujer que practica regularmente ejercicio o no, entre otros.

La mujer embarazada puede notar que el bebé está encajado si su barriga de repente se observa más baja, inclinada hacia delante, y experimenta una serie de señales que veremos en el siguiente apartado.

Los profesionales sanitarios, como de ginecología y enfermería, pueden verificar que se ha producido el encajamiento si se nota la cabeza del feto y esta permanece fija y no puede moverse libremente. También si se palpa el vientre y solamente se notan dos quintas partes de su cabeza por encima de la pelvis materna.

El encajamiento produce en parte un alivio a la futura mamá en determinados aspectos, aunque también tiene algunas desventajas.

Proporciona una sensación de ligereza debido a lo siguiente:

• Se respira con menor dificultad, ya que al descender el bebé hacia abajo los pulmones tienen más espacio para poder expandirse y el diafragma recibe menor presión.
• Mejoras digestivas. Si se sufren muchos episodios de acidez estomacal durante el embarazo, en este momento mejoran, al igual que las digestiones, que se vuelven menos pesadas y más fáciles.

Por el contrario, es muy probable que el aligeramiento provoque una serie de molestias añadidas:

• Hay una necesidad frecuente de ir al baño a orinar. Esto se debe a que la cabeza del bebé está ejerciendo una presión extra sobre la vejiga y este órgano no puede retener tanta cantidad de orina como antes.
• Se tiene menos equilibrio al estar de pie y al caminar, ya que se ha modificado de nuevo el centro de gravedad del cuerpo de la madre.
• El bebé con su peso ejerce presión sobre la pelvis y el suelo pélvico, lo que provoca en esta zona una serie de molestos calambres que pueden notarse a diario.

Normalmente las embarazadas suelen notar algunas de estas señales o todas, pero hay casos en los que la mujer no notará ninguna de estas sensaciones, porque ya tenga desde antes la barriga baja.

Muchas personas piensan que tener la barriga baja porque se ha producido el encajamiento es signo de que el trabajo de parto está muy cerca, pero nada más lejos de la realidad. El aligeramiento no es un buen indicador para saber qué día va a nacer el bebé.

• Si se trata de mujeres que se encuentran en su primer embarazo, la cabeza del bebé se encajará en la pelvis unas semanas antes de dar a luz, pudiendo oscilar entre 2-4 semanas o más incluso.
• Si es el segundo embarazo, el tercero, o sucesivos, el encajamiento no se va a producir normalmente hasta el momento en el que se pongan de parto.

Si tu bebé aún no se ha encajado y estás en un estado avanzado de embarazo, puedes intentarlo practicando una serie de ejercicios que hagan mover la pelvis. Puedes utilizar una pelota grande de pilates, sentarte encima de ella y dibujar círculos y ochos con la cadera varias veces al día, para facilitar al feto el proceso de encajamiento. En el siguiente artículo encontrarás ejercicios de suelo pélvico especiales para el embarazo.

Si deseas leer más artículos parecidos a Si el bebé ya está encajado, ¿cuánto falta para el parto?, te recomendamos que entres en nuestra categoría de Salud en el embarazo.