¿Se puede tomar ibuprofeno en el embarazo?

El ibuprofeno es un fármaco con propiedades analgésicas, antiinflamatorias y antipiréticas, es decir, sirve para atacar los dolores leves a moderados y la fiebre. Pertenece al grupo de los antiinflamatorios no esteroideo (AINES) junto con el diclofenac y la aspirina, por lo que se utiliza en casi todas las molestias que cursen con inflamación.

Es usual que en el embarazo aparezcan ciertas molestias como cólicos, dolores de espalda, dolor de cabeza, entre otros; esto hace que las madres se vean tentadas a usar fármacos, en especial los de venta libre como el ibuprofeno.

Sin embargo, durante el embarazo, se debe evitar el consumo de ibuprofeno, pues diversos estudios lo consideran un fármaco no seguro por aumentar el riesgo de padecer complicaciones durante el embarazo y alteraciones en el desarrollo del bebé. Por esta razón, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), recomendó evitar el uso de los AINES después de la semana 20 del embarazo, en especial, luego de la semana 24.

¿Pasa algo por tomar ibuprofeno embarazada? Si bien es cierto que tomarse una pastilla no va a causar un daño en tu bebé, el consumo recurrente durante todas las etapas si puede influir negativamente, en especial cuando se consumen dosis por encima de 1200mg al día. Lo mejor es evitarlo, veamos por qué.

Qué pasa si tomo ibuprofeno en el tercer trimestre de embarazo

Tomar ibuprofeno en el tercer trimestre del embarazo puede causar diversos daños graves en el bebé, como problemas en el desarrollo de sus pulmones por falta de líquido amniótico o en el desarrollo del corazón por una obstrucción de las arterias del mismo.

Además, también puede retrasar el comienzo del parto, por lo que este se prolongaría. Por todo ello, podría ser que tu médico considerara administrarte una dosis mínima de ibuprofeno como máximo hasta el segundo trimestre, retirando por completo el fármaco al alcanzar el tercero.

¿Qué pasa si tomo ibuprofeno en el embarazo? El consumo de ibuprofeno puede traer importantes consecuencias sobre el embarazo y el bebé, especial en el tercer trimestre, a continuación, te describimos los principales riesgos al que se ve expuesto:

• Aborto espontáneo: el ibuprofeno interfiere en la adecuada implantación del embrión en el útero, y a pesar de que los expertos afirman que este fármaco se puede utilizar hasta la semana 24, el riesgo de aborto espontáneo aumenta de 2 a 4 veces en mujeres que consumen ibuprofeno u otros AINES desde dos semanas antes de la concepción hasta la semana 20 del embarazo.
• Cierre del conducto arterioso fetal: el ibuprofeno puede causar un cierre prematuro del ductus arterioso del corazón, un vaso sanguíneo que conecta la aorta con la arteria pulmonar y que se cierra luego del nacimiento. Esto provoca en el bebé un aumento de la presión pulmonar y arterial dentro del útero, a su vez puede causar una disfunción renal.
• Oligohidramnios: el consumo de ibuprofeno después de la semana 20 puede ocasionar una disminución en la cantidad de líquido amniótico, aumentando el riesgo de aborto, parto prematuro o muerte fetal.
• Retraso del parto: el ibuprofeno inhibe la producción de prostaglandinas, una sustancia necesaria para la maduración del cuello uterino y a su vez para desencadenar las contracciones uterinas. De esta manera, puede causar un retraso en la llegada del parto y una prolongación del mismo. Esta es una de las razones por la que está prohibido en las semanas finales del embarazo.
• Futura fertilidad: un estudio realizado en Francia en el 2018 concluyó que el consumo de altas dosis de ibuprofeno en las primeras semanas de embarazo, puede producir una pérdida drástica de células germinales a partir de las cuales se desarrollarán los óvulos en las bebés y una afectación testicular alterando la futura producción de espermatozoides en los fetos masculinos.

¿Qué antiinflamatorio puede tomar una embarazada? En caso de presentar dolor, malestar o fiebre durante el embarazo, una alternativa segura es el paracetamol, pues no se ha encontrado una asociación de este fármaco con malformaciones congénitas en el bebé, sin embargo, como todos los medicamentos, su uso debe ser puntual y prescrito por el médico.

Por lo que si te preguntabas qué puede tomar una embarazada, ibuprofeno o paracetamol, debes saber que la opción más segura es el paracetamol. El paracetamol no inhibe la síntesis de prostaglandinas ni interfiere con la agregación plaquetaria, como lo hacen los antinflamatorios no esteroideos AINES, en este caso el ibuprofeno. En este artículo hablamos sobre qué tomar para el dolor de cabeza en el embarazo.

Así mismo, algunas infusiones pueden servirte de ayuda para calmar algunos malestares como resfriados y dolores. La manzanilla, el jengibre, el roooibos y el tomillo son seguras de consumir en el embarazo, eso sí, con la autorización de tu médico/a.

En general, el consumo de fármacos durante el embarazo debe evitarse, estas sustancias llegan al bebé a través de la circulación materno fetal pudiendo afectar su bienestar y los efectos de muchos fármacos en la gestación aún no han sido estudiados.

Si presentas algún malestar o dolor, antes de consumir cualquier fármaco o infusión, es necesario que sea tu médico/a o matrona quienes te den su aprobación. Durante la gestación, antes de consumir algo debemos pensarlo literalmente dos veces.

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