Qué son los entuertos después del parto y cómo aliviarlos

¿Cómo es el dolor de los entuertos? Los entuertos son contracciones uterinas intensas y dolorosas que aparecen después del parto y que favorecen la involución uterina, es decir, el proceso de regresión del útero a su estado y ubicación habitual. Estos entuertos forman parte del proceso fisiológico que se produce en la madre durante el postparto inmediato.

A su vez, los entuertos se perciben como un dolor agudo en el área abdominal que se desencadena después del nacimiento del bebé y de la expulsión de la placenta. Estos dolores se parecen a los retortijones que se sienten en el vientre durante la regla, aunque siendo de una mayor intensidad.

En qué momentos suelen aparecer

Los entuertos después del parto aparecen con mayor frecuencia en el momento de amamantar al bebé, ya que la succión del pecho libera oxitocina, una hormona que, además de eyectar la leche de las mamas, ayuda a que se produzcan estos espasmos uterinos, de una manera fuerte y sostenida.

Asimismo, son más dolorosos en las horas posteriores al parto, intensificando los malestares producidos por la episiotomía o la herida de la cesárea. Por suerte, los dolores de entuerto tienden a desaparecer con el pasar de los días, en la medida en que el útero recupere su estado de normalidad.

Los entuertos pueden resultar muy incómodos, sin embargo, son muy necesarios para la recuperación de la madre. A través de estas fuertes contracciones uterinas, el útero elimina coágulos sanguíneos y restos de tejidos que se encuentran en su interior, favoreciendo que vuelva a su tamaño, altura y ubicación original.

De igual modo, con estos calambres se cierran los vasos sanguíneos que conducían la sangre a la placenta durante la gestación y que quedan expuestos tras el nacimiento del bebé. De esta forma, el cuerpo naturalmente previene de forma natural las hemorragias postparto, una complicación que puede llegar a ser muy grave para la madre.

Como ya hemos mencionado anteriormente, los entuertos son un síntoma del postparto y aparecen de forma involuntaria tras el parto o cesárea. Son más intensos y dolorosos en las primeras 24 a 48 horas después del parto y tienden a durar entre 5 y 7 días. Eso sí, su intensidad y frecuencia irá disminuyendo progresivamente.

Por otra parte, durante el primer embarazo estos entuertos no suelen causar tanto dolor como en embarazos posteriores. Esto se debe a que las fibras musculares están más flácidas tras pasar por varios embarazos o cuando se han producido embarazos de gemelos o trillizos. De este modo, en busca de tonificar el útero y volverlo a su estado original, las contracciones suelen ser más intensas y dolorosas.

Cabe destacar que las mujeres que se someten a cesáreas tienden a sentirlos más que las que tienen un parto vaginal, ya que los entuertos intensifican el dolor abdominal tras haber pasado por una cesárea, molestia que se suma al que genera la cicatriz operatoria.

¿Qué es bueno para sacar los entuertos después del parto? Los entuertos son un síntoma normal del postparto y no pueden evitarse, sin embargo, existen algunas formas de disminuir la intensidad del dolor. Seguidamente, te mostramos algunos consejos para lograrlo:

• Orinar frecuentemente: cuando la vejiga está llena presiona el útero, lo que dificultará la contracción uterina y generará entuertos más dolorosos.
• Realizar masajes en el bajo vientre: realizar suaves masajes sobre el útero entre cada entuerto hará que la contracción sea más leve y ayudará a que el útero se recupere en menos tiempo.
• Cambiar la postura: en ocasiones, al cambiar la posición corporal se disminuye la intensidad con la que se percibe el dolor.
• Colocar una bolsa de agua tibia sobre el abdomen: el calor ayuda a aliviar el malestar en el vientre, pero siempre deberás solicitar la aprobación de tu médico. También puedes utilizar una almohadilla térmica.
• Consumo de fármacos: no suelen recomendarse medicamentos para estos dolores, no obstante, si los entuertos son muy dolorosos, el médico puede recetar un antiespasmódico.
• Mantener la relajación: cuanta más tensión tengas en los músculos abdominales, más dolorosos serán los entuertos. Por este motivo, es recomendable realizar ejercicios de respiración que favorezcan la relajación muscular, como los aprendidos en las clases de parto.

A pesar de que en ocasiones pueden ser muy molestos molestos, los entuertos son una señal de que todo marcha bien después del nacimiento del bebé, ya que previenen las pérdidas sanguíneas en el postparto inmediato y ayudan a que el útero se recupere rápidamente.

Asimismo, es importante tener en cuenta que estos dolores abdominales son frecuentes los primeros días. Si persisten más de una o dos semanas o se hacen más intensos con el pasar de los días será necesario comentarlo con el especialista con el fin de descartar posibles complicaciones.

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