Qué hacer si estoy embarazada y no quiero tenerlo

Qué hacer si estoy embarazada y no quiero tenerlo

La decisión de traer un bebé al mundo suele ser un tema bastante delicado. En ocasiones, existen muchos factores que pueden incidir sobre la embarazada para tomar la decisión de no tenerlo. Sin embargo, tanto la práctica del aborto como cualquier otro método, debe ser guiado por profesionales de la salud para prevenir complicaciones que pongan en riesgo la vida de la mujer.

¿Qué hacer si estoy embarazada y no quiero tenerlo? En este artículo de paraBebés, te mostraremos qué opciones que existen para interrumpir un embarazo de forma segura, dependiendo de la semana de gestación en la que se practiquen.

Método químico

¿Qué puedo hacer si creo que estoy embarazada y no quiero tenerlo? Uno de los métodos a los que puedes recurrir es el aborto químico, en el que la interrupción del embarazo se hace mediante la administración de fármacos vía oral, sublingual o vaginal.

Este método abortivo se realiza solo cuando el embarazo tiene entre 4 semanas y 7 semanas. Pasado este periodo de tiempo, el aborto debe ser quirúrgico, teniendo en cuenta las leyes de cada país.

Este es el método abortivo más utilizado, debido a su practicidad, rapidez y seguridad, aun así, debe ser indicado por el especialista para evaluar la dosis de los medicamentos y sus posibles complicaciones. Concretamente, los fármacos indicados para llevarlo a cabo son la mifepristona, el misoprostol y, en algunos casos, las prostaglandinas. Veremos más sobre ellos en los siguientes apartados.

Píldora RU-486

La píldora abortiva RU-486, también conocida como Mifepristona DCI, es un fármaco abortivo, antagonista de la hormona progesterona, que se pude administrar hasta la semana 7, después de la fecha de la última regla. Como sabemos, la progesterona es una hormona que se produce en los ovarios y alcanza niveles muy altos en sangre durante el embarazo para favorecer el desarrollo del mismo.

Si estás embarazada y no quieres tenerlo, al tomar la mifepristona esta evita que la progesterona ejerza sus funciones y provoca que el revestimiento del útero se descomponga y se desprenda. Esto hace que el embarazo sea inviable y se interrumpa.

Misoprostol

24 o 48 horas después de la administración de la mifepristona, se indica otro fármaco llamado misoprostol o cytotec, compuesto por oxitocina. De forma sintética, este producirá la dilatación del cuello y las contracciones uterinas, con el fin de vaciar el útero y expulsar los restos de tejidos embrionarios que queden después de la administración de mifepristona.

La OMS considera que el misoprostol es un medicamento seguro, siempre y cuando se administre bajo prescripción médica y la mujer lo consuma de forma adecuada: tres tomas de 4 pastillas de 200 microgramos cada una (en total 800 microgramos por toma), con tres horas de diferencia entre una toma y otra. El riesgo de complicaciones después de su administración es mínimo, sin embargo, hay que vigilar en caso de hemorragias.

Efectos secundarios de tomar misoprostol

Es importante destacar que después de la administración de este medicamento se producen los siguientes efectos secundarios:

  • Dolores abdominales parecidos a los de un cólico menstrual.
  • Coágulos que duran de 3 a 5 horas.
  • Sangrado leve que puede extenderse durante varios días después de su consumo.

Entre los 10 a 14 días posteriores al uso del misoprostol, se recomienda realizar un control médico para verificar que el aborto esté completo. En caso de que el cuello uterino no se haya dilatado eficientemente y no se expulse todo el contenido del útero, el especialista deberá realizar un legrado quirúrgico con el fin de prevenir infecciones.

Método quirúrgico

Ante la duda de qué hacer si estoy embarazada y no quiero tenerlo, otro método al que puedes recurrir, a partir de la semana 8 o 9 de gestación, es el quirúrgico. Este método implica que el médico realice una intervención quirúrgica con el fin de interrumpir el embarazo, extrayendo el tejido embrionario formado en el útero. En los siguientes apartados veremos las técnicas a las que se recurre para hacerlo.

Aspiración o aborto instrumental

Si estás embarazada y no quieres tenerlo, debes saber que el procedimiento de aborto instrumental se utiliza hasta la semana 14 de gestación y es la técnica quirúrgica más utilizada en la actualidad. Dura entre 5 y 10 minutos y el especialista la realiza de la siguiente manera:

  1. Administra un anestésico local.
  2. Realiza la dilatación del cuello uterino con unas varillas dilatadoras.
  3. Introduce un pequeño tubo de succión dentro del útero. La succión se utiliza para extraer el feto y los tejidos formados en el embarazo.
  4. Evalúa los signos de hemorragia e infección como sangramientos, fiebre, dolor abdominal y flujo vaginal maloliente. De ocurrir, es necesaria la evaluación inmediata del especialista.

Para evitar complicaciones, es habitual indicar la toma de analgésicos y antibióticos después de este tipo de procedimiento.

Legrado uterino

Otra técnica quirúrgica para interrumpir el embarazo en el primer trimestre es el legrado uterino. En este se procede a raspar las paredes internas del útero con el fin de vaciarlo de todo el contenido embrionario. Requiere anestesia y tiene una duración de 15 minutos aproximadamente.

Cabe destacar que existen otros métodos, como el de indicción para interrumpir los embarazos de más de 14 semanas, sin embargo, son técnicas quirúrgicas más complejas y donde se amerita una hospitalización. Además, estas están sujetas a penalidades, dependiendo de las leyes de cada país.

Como ya has visto, si te preguntas qué hacer si estoy embarazada y no quiero tenerlo, lo primero que debes hacer es pedir ayuda profesional, pues practicarse un aborto amerita una preparación psicológica y física. Ciertamente, mientras más rápido se practique la interrupción de un embarazo, menos riesgos hay para la mujer y menos probabilidades de que se produzcan complicaciones en el proceso. Lo ideal es que sea antes de la semana 12 de gestación.

Ante estos casos, es conveniente que el tema sea tratado a fondo con el ginecólogo, siguiendo paso a paso sus indicaciones. Además, no hay que dejar a un lado la necesidad de comentarlo con un especialista en psicología, pues es un proceso que puede tener otras implicaciones más allá de las ginecológicas. Después de la práctica de un aborto, ya sea químico o quirúrgico, es indispensable el seguimiento médico durante los días posteriores.

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Bibliografía
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  • MayoClinic (2021). Aborto médico. Recuperado de: https://www.mayoclinic.org/es-es/tests-procedures/medical-abortion/about/pac-20394687
  • MedlinePlus (2021). Terminación del embarazo con medicamentos. Recuperado de: https://medlineplus.gov/spanish/ency/patientinstructions/000835.htm
  • Ministerio de salud de Argentina. Dirección nacional de salud sexual y reproductiva (2020). Interrupción legal del embarazo (ILE) con medicamentos. Recuperado de: https://bancos.salud.gob.ar/sites/default/files/2020-12/Folleto-ILE-con-medicamentos2.pdf