Qué es la vérnix caseosa del recién nacido y para qué sirve

Qué es la vérnix caseosa del recién nacido y para qué sirve

Causa curiosidad que al observar fotos de bebés que acaban de salir del vientre de su madre, muchos de ellos tienen una especie sustancia grasosa blanca que recubre toda su piel. A esta sustancia se la conoce como vérnix caseosa, solo la tienen los seres humanos cuando nacen y cumple importantes funciones protectoras en este tejido del bebé.

En este artículo de paraBebés, te contaremos qué es la vérnix caseosa del recién nacido y para qué sirve. Además, también hablaremos sobre cuál es su composición y cuándo es conveniente retirarla de la piel del bebé después de nacer.

Qué es la vérnix caseosa del recién nacido

La vérnix caseosa, también conocida como unto sebáceo, es una película blancuzca o amarillenta que cubre la piel de los recién nacidos. Su nombre se debe a su aspecto, como de crema untable de queso, pues tiene su origen en los términos latinos vérnix, que significa "barniz", y caseus, que significa "queso".

La vérnix caseosa se encuentra en mayor cantidad en la espalda, el pecho, el cuero cabelludo y en los pliegues de las extremidades del bebé, aunque en algunos niños puede observarse en todo el cuerpo. Esta sustancia solo la producen de los seres humanos en el útero materno. Empieza a producirse alrededor de la semana 19 de embarazo y alcanza su máximo espesor en el tercer trimestre.

Algunos bebés no tienen vérnix caseosa cuando nacen. Esto se debe a que a partir de la semana 36 de embarazo comienza a diluirse y desaparecer. Por eso, es habitual observar que los bebés prematuros contienen más vérnix caseosa que en los bebés que nacen en la semana 40 de gestación.

Ahora bien, los bebés dentro del útero tienen una piel bastante delicada y poco desarrollada que la hace propensa a irritaciones, sequedad y hasta infecciones. Esta capa grasosa actúa como barrera para proteger la frágil piel del bebé de irritaciones y de infecciones dentro del útero y después del nacimiento.

Composición de la vérnix caseosa del recién nacido

La vérnix caseosa está compuesta por los siguientes elementos:

  • 10% de grasas.
  • 10% de proteínas.
  • Restos de células epidérmicas.
  • Secreciones de las glándulas sebáceas.
  • Lanugo fetal.
  • Vitamina E.
  • Péptidos que actúan como defensas naturales, específicamente, con funciones antimicrobianas.

Los lípidos y las proteínas que componen la vérnix caseosa le aportan esa textura ligeramente grasosa que favorece la protección de la piel, pues permite que esta no absorba demasiada cantidad de agua del líquido amniótico. Además, esta es la razón por la que la piel del bebé no está arrugada cuando nace. De lo contrario, su aspecto sería similar al que adquiere nuestra piel al pasar horas dentro del agua.

Para qué sirve la vérnix caseosa del recién nacido

Esta estructura se encarga de proteger e hidratar la piel del bebé. Veamos en detalle para qué sirve la vérnix caseosa dentro y fuera del útero.

Funciones de la vérnix caseosa dentro del útero

El unto sebáceo del bebé ejerce las siguientes funciones dentro del útero:

  • Ayuda a la formación de la piel: la vérnix caseosa y el estrato córneo, es decir, la capa mas externa de la piel, ayuda a la formación y al crecimiento de la misma, pues el estrato córneo solo se puede desarrollar en el ambiente seco que le proporciona la vérnix caseosa, pues lo aisla del líquido amniótico.
  • Aislante de la humedad: actúa como una barrera para aislar la humedad de la piel del bebé, evitando que se deshidrate.
  • Protege la piel del líquido amniótico: el líquido amniótico es ácido y contiene sustancias irritantes que pueden ser bastante dañinas para la piel del bebé si no estuviese protegida por la vérnix caseosa.
  • Ayuda a desarrollar los intestinos del bebé: esto gracias a los aminoácidos que contiene.
  • Favorece la salida por el canal del parto: al ser de textura aceitosa, la vérnix caseosa ayuda a que el bebé se deslice con mayor facilidad por el canal del parto.

Funciones de la vérnix caseosa fuera del útero

Después del nacimiento, las funciones de la vérnix caseosa del recién nacido son:

  • Proteger la piel del bebé de infecciones: los polipéptidos que contiene la vérnix caseosa ayudan a proteger la piel de las bacterias comunes y de hongos que se encuentran el canal del parto y en el ambiente. De allí su aporte al sistema de defensa del bebé durante los primeros días de nacido.
  • Ayuda al desarrollo del manto acido de la piel: los recién nacidos tienen un pH casi neutro (alrededor de los 6.5). Con el pasar de los días y con la ayuda de esta sustancia, se va acidificando la piel. Esto es importante para proteger la piel de los efectos de las bacterias y otros agentes nocivos.
  • Regular la temperatura: los recién nacidos que mantienen su vérnix regulan mejor su temperatura corporal.
  • Mantener la piel de bebé hidratada: la vérnix caseosa contiene alrededor de un 80% de agua, además de lípidos y proteínas que hidratan la piel del bebé.
  • Propiedades antioxidantes: gracias a su contenido de vitamina E. Esta vitamina también ayuda a proteger al bebé de los rayos ultravioletas del sol.

Estas son las razones por las que es necesario que esta sustancia permanezca sobre la piel del bebé después del parto hasta su total absorción. Además, de mantenerlo hidratado y ayudarlo autoregularizar su temperatura, lo protege de agentes infecciosos.

Cuándo limpiar la vérnix caseosa del recién nacido

Ante la duda de cuánto dura el vérnix caseoso, debes saber que este se absorbe lentamente en la piel del bebé durante las primeras 24 a 48 horas después del nacimiento. Debido a los múltiples beneficios que aporta esta sustancia, los especialistas recomiendan no limpiarla y retrasar el primer baño hasta que se haya absorbido la mayor parte de ella.

En relación al primer baño del recién nacido, la Academia Estadounidense de Pediatría recomienda esperar un día antes de bañar a su bebé. De igual manera, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que el primer baño de un recién nacido a término sano debe demorarse por al menos 24 horas después del nacimiento. En este artículo encontrarás indicaciones sobre cómo bañar a un bebé.

Aun así, la última palabra en esta decisión la tienen los padres y la orientación que les brinde el pediatra. En la actualidad, la mayor parte de los especialistas coinciden en bañar a los bebés entre las 48 y 72 horas después de su nacimiento para aprovechar las propiedades de la vérnix caseosa.

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Bibliografía
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