Parto velado: qué es, causas y beneficios para el bebé

Un parto velado, también conocido como nacimiento "en caul" (del inglés, que significa "con el velo" o "cofia"), se caracteriza porque el bebé emerge del canal de parto, aún dentro del saco amniótico total o parcialmente intacto. El saco amniótico, es una bolsa llena de líquido que ha protegido y nutrido al bebé durante toda la gestación, no se rompe antes ni durante el trabajo de parto, sino que acompaña al bebé en su salida al mundo exterior.

Para entender mejor el parto velado, recordemos brevemente qué es el saco amniótico. Es una estructura de dos membranas principales:

• El amnios (membrana interna): que está en contacto directo con el líquido amniótico y el feto.
• El corion (membrana externa): que está en contacto con el revestimiento uterino. Este saco está lleno de líquido amniótico, que cumple funciones vitales durante el embarazo: protege al feto de golpes, permite su movimiento y desarrollo musculoesquelético, mantiene una temperatura constante y actúa como barrera contra infecciones.

En un parto típico, las membranas se rompen espontáneamente (la "fuente") en algún momento antes o durante el trabajo de parto, o son rotas artificialmente por el personal médico (amniotomía) para intentar acelerar el proceso.

En un parto velado, esta ruptura no sucede hasta después de que el bebé ha nacido, o el profesional de la salud que asiste el parto rompe suavemente el saco una vez que el bebé está fuera.

Es importante distinguir dos escenarios principales, dentro de lo que comúnmente se engloba como parto velado:

• Nacimiento "en caul" completo: este es el tipo más raro y quizás el más espectacular visualmente. Porque el bebé nace completamente envuelto dentro del saco amniótico intacto, flotando en el líquido amniótico restante. El saco parece una burbuja gelatinosa y transparente, que contiene al bebé, que continúa recibiendo oxígeno y nutrientes a través del cordón umbilical mientras la placenta siga adherida.
• Nacimiento "con el velo": esta variante es un poco más común que el nacimiento en caul completo. En este caso, solo una porción de las membranas amnióticas permanece cubriendo la cabeza y/o la cara del bebé, como un velo delgado y translúcido al momento de nacer. Generalmente, es la membrana interna (el amnios) la que forma este velo. El resto del saco pudo haberse roto durante el parto, pero esta porción específica permaneció adherida al bebé.

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No existe una única causa científicamente establecida, que explique por qué ocurre un parto velado. A menudo, se considera un evento fortuito o una combinación de varios factores, que permiten que las membranas amnióticas permanezcan íntegras durante todo el proceso de nacimiento.

Algunas de las posibles causas del parto velado o factores que se han observado incluyen las siguientes:

Fuerza y elasticidad de las membranas amnióticas

Algunas membranas amnióticas pueden ser naturalmente más fuertes, gruesas o elásticas de lo habitual, lo que les permitiría resistir la presión de las contracciones uterinas, el descenso del bebé por el canal de parto y las manipulaciones, sin romperse.

Trabajo de parto rápido

En algunos casos, el trabajo de parto puede progresar tan rápidamente, que el bebé nace antes de que las membranas tengan la oportunidad de romperse, bajo la presión habitual de un parto más prolongado. El bebé simplemente "se desliza" hacia afuera envuelto en el saco.

Prematuridad

El parto velado se observa con mayor frecuencia en los partos prematuros. Los bebés prematuros son más pequeños y el volumen de líquido amniótico, puede ser menor, lo que podría significar que el saco no está tan distendido o sometido a tanta presión interna. Te contamos más sobre el nacimiento prematuro en "Qué pasa si mi bebé nace a las 36 semanas".

Cantidad de líquido amniótico

Teóricamente, un volumen de líquido amniótico que no sea excesivo, ni demasiado escaso, podría jugar un papel, aunque esto es más especulativo.

Mínima intervención médica

La probabilidad de un parto velado natural, aumenta significativamente en ausencia de intervenciones médicas rutinarias como la amniotomía (rotura artificial de membranas). Si no se realiza esta intervención, las membranas tienen la oportunidad de permanecer intactas.

Partos en el agua

Existe evidencia anecdótica y algunas observaciones que sugieren, que los partos en el agua podrían tener una incidencia ligeramente mayor de parto velado.

Presentación fetal

Aunque menos estudiado, es posible que ciertas presentaciones fetales (la forma en que el bebé está colocado para nacer) puedan influir en cómo se distribuye la presión sobre el saco amniótico. En muchos casos de parto velado, no se identifica una causa específica clara; simplemente, las condiciones son las adecuadas para que este fenómeno ocurra.

Más allá de lo visualmente impactante y la rareza del evento, se han propuesto varios beneficios potenciales para el bebé que nace en un parto velado, especialmente en ciertos contextos como la prematuridad:

• Protección y amortiguación durante el parto: el líquido amniótico dentro del saco intacto, continúa ofreciendo una amortiguación natural para la cabeza y el cuerpo del bebé, durante las contracciones uterinas y su paso por el canal de parto.
• Menor riesgo de compresión del cordón umbilical: el cordón umbilical flota libremente en el líquido amniótico. Mientras el saco permanezca intacto, el cordón está protegido de ser comprimido entre el cuerpo del bebé y las paredes del útero o el canal de parto durante las contracciones. Puede que te interese "Cómo se forma el cordón umbilical".
• Transición potencialmente más suave al mundo exterior: nacer dentro del saco amniótico permite una transición menos traumática del ambiente acuático y protegido del útero al mundo exterior. Esto podría darle unos momentos extra para adaptarse antes de su primera respiración de aire.
• Reducción del riesgo de infección: las membranas amnióticas intactas, actúan como una barrera estéril natural, protegiendo al bebé de la exposición a bacterias presentes en el tracto genital inferior de la madre.
• Beneficios específicos en partos prematuros: los bebés prematuros parecen beneficiarse particularmente de un nacimiento "en caul". La protección adicional contra el trauma físico, la posible reducción del estrés y la hipotermia (al permanecer en un ambiente cálido y húmedo por más tiempo) son ventajas importantes
• Menor estrés fetal: la combinación de una mejor oxigenación y una transición más amortiguada podría, teóricamente, resultar en un menor nivel de estrés fisiológico para el bebé durante el exigente proceso del nacimiento.

Es importante notar que muchos de estos beneficios son teóricos o se basan en observaciones y estudios pequeños, especialmente para bebés a término. Sin embargo, la idea de una transición más protegida y gentil es intuitivamente atractiva.

En la inmensa mayoría de los casos, un parto velado o un nacimiento con el velo, es un evento benigno y no conlleva consecuencias negativas ni para la madre ni para el bebé, siempre y cuando sea asistido por un profesional de la salud competente que sepa cómo manejarlo.

Es más una curiosidad y un momento especial que un problema médico. Algunas de las posibles consecuencias del parto velado y su riesgo:

• Retraso mínimo en la primera respiración: mientras el bebé está en el saco y el cordón umbilical, sigue conectado con una placenta funcional, seguirá recibiendo oxígeno. El retraso en la transición a la respiración pulmonar, es de segundos y está controlado por el profesional que asiste el parto al romper el saco. No suele ser un problema.
• Necesidad de intervención para romper el saco: como se mencionó, esto no es una "consecuencia" negativa, sino un paso necesario y simple del manejo.
• Aspecto visual sorprendente: para los padres o el personal menos familiarizado, la visión de un bebé naciendo dentro de la bolsa puede ser impactante o sorprendente, pero no es inherentemente peligroso en un entorno asistido.
• "Velo" adherido a la piel: si solo una porción de la membrana (el "velo") queda sobre la cabeza o cara del bebé, esta se retira con mucha facilidad, como una película delgada. A veces, puede secarse y desprenderse sola si es muy fina.
• No se asocia con problemas a largo plazo: nacer en un parto velado no se ha asociado con ningún problema de salud o desarrollo a largo plazo para el bebé. Son bebés tan sanos y normales como cualquier otro.

En partos que no son asistidos, teóricamente, si un parto velado ocurriera sin ninguna asistencia médica y el saco no se rompiera espontáneamente o por el bebé, podría existir un riesgo de asfixia una vez que la placenta comenzara a desprenderse o el flujo del cordón umbilical cesara.

Sin embargo, esta es una situación altamente improbable en la sociedad actual donde la mayoría de los partos son asistidos. En cualquier parto atendido por un profesional, el manejo del saco es inmediato y seguro.

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