Parto instrumental: qué es, tipos, ventajas y desventajas

Como su nombre lo indica, un parto vaginal instrumental se basa en usar instrumentos específicos, tales como fórceps, espátulas o vacuo, entre otros, para ayudar a extraer la cabeza del bebé. Existen diferentes técnicas, pero la idea es ampliar el canal vaginal y aplicar tracción, imitando lo mejor posible el momento de un parto vaginal normal, y minimizar los riesgos, tanto para la madre como para el bebé.

Existen condiciones que deben tomarse en cuenta antes de aplicar el parto instrumental:

• La fase de dilatación debe haberse completado.
• La bolsa amniótica debe estar rota. Descubre por qué se rompe la bolsa amniótica.
• Debe existir información veraz que indique la presentación, la variedad de posición y la actitud fetal.
• Debe realizarse una ecografía antes de iniciar el parto, previa al procedimiento.
• Verificar que el feto tenga unas medidas proporcionales para su edad gestacional.
• La presentación debe alcanzar al menos el III plano de Hodge. Si saber de qué se trata, en este artículo, te contamos qué son los planos de Hodge y para qué sirven.
• La anestesia de la madre debe ser la adecuada.

Cabe destacar que se desaconseja el uso de la episiotomía en este tipo de instrumentación, sin embargo, el criterio de su aplicación dependerá del especialista que lo realice, puesto que ha demostrado menor probabilidad de desgarro del esfínter anal al hacerlo.

La clasificación de los diferentes tipos de parto instrumental sigue un patrón sin muchas variaciones. Veamos cuáles son:

• Con desprendimiento: se refiere a que la presentación ha llegado al piso de la pelvis. A nivel vaginal, es posible visualizar el cuero cabelludo del feto. La rotación no debe superar los 45 grados.
• Bajo: la presentación está en el punto más inclinado, entre el piso de la pelvis y 2 cm por encima de las espinas ciáticas. La rotación puede variar entre menos de 45 grados o más de 45 grados.
• Medio: la presentación se puede palpar a nivel del abdomen y la rotaciones por debajo de los 45 grados.

El objetivo del parto instrumental es copiar las fases que deben ocurrir en un parto eutócico, con la finalidad de minimizar los posibles riesgos en la madre o el bebé. En general, si lo realizan manos expertas, es un procedimiento seguro que no aumenta la presión sobre la cabeza del feto, sino que ayuda a evitar complicaciones graves.

Así pues, entre las principales ventajas del parto instrumental encontramos las siguientes:

• Disminución del sufrimiento fetal.
• Ayuda a la madre en el proceso de parto, cuando este se prolonga o es trabajoso.
• Disminuye las alteraciones de la madre, en caso de presentar problemas cardíacos o cerebrales.
• Ayuda a la madre en caso de no poder empujar lo suficiente.

Existen algunas controversias en cuanto al uso del parto instrumental. A continuación, te mostramos los posibles riesgos que conlleva, tanto para la madre como para el bebé.

Complicaciones maternas en el parto instrumental

El parto instrumental presenta los siguientes riesgos para la madre:

• Roturas en la de vagina, cuello y cuerpo del útero.
• Desgarros musculares y del esfínter anal.
• Lesiones en el nervio pudendo, el cual se ubica entre la región pélvica e inerva los genitales externos, incluyendo el ano.
• Abertura mayor de la episiotomía.
• Maltratos a órganos cercanos.
• Hematomas, debido al rompimiento del coxis.
• Dolor posterior al parto, debido a la manipulación excesiva.

Riesgos del parto instrumental para el neonato

El parto instrumental conlleva los siguientes riesgos para el bebé:

• Moretones, laceraciones, erosiones y marcas en la piel.
• Lesiones y acumulación de sangre en la cabeza (cefalohematomas).
• Posibles hemorragias y fracturas craneales.
• Lesiones en la cara.
• Dolor que le puede impedir alimentarse adecuadamente.

El equipo de un parto instrumental incluye los siguientes instrumentos obstétricos:

• Fórceps: es el instrumento más utilizado en este tipo de parto. Tiene dos ramas articuladas con orificios que se ajustan a la cabeza del bebé y permiten su descenso, hasta completar el parto con fórceps. Es útil para ayudar a rotar la cabeza del pequeño, en caso de ser necesario.
• Ventosa: es una pieza con forma de copa que, al introducirse en la vagina, se acopla fácilmente sobre la cabeza fetal y, mediante una bomba conectada al vacío, ejerce una suave tracción durante cada contracción. Esto ayuda a que el bebé descienda y se produzca el nacimiento. Está fabricada con varios materiales como el metal, la silicona o el plástico. No es útil para ayudar a rotar la cabeza del feto.
• Espátula: es una pieza muy parecida al fórceps pero no tiene orificio. Se calza en la cabeza del feto y ayuda durante el descenso.

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