Gastroenteritis en bebés: causas, síntomas y tratamiento

La gastroenteritis en bebés tiene 2 causas principales:

1. Infección

La gastroenteritis es habitualmente causada por una infección que produce la inflamación del estómago y los intestinos, que se manifiesta, principalmente, por el cambio de consistencia en las heces o diarrea, así como aumento en la frecuencia de las mismas (la OMS considera 3 veces o más en 24 horas).

• Infección viral: la principal causa en niños menores de 5 años, es atribuida a una infección de origen viral, que puede trasmitirse fácilmente por el contacto de una persona a otra, siendo el Rotavirus, Norovirus y Adenovirus, los principales agentes causales. La principal forma de transmisión en los niños ocurre por el contacto o exposición que tienen con otros niños, en los parques, guarderías, fiestas infantiles u otros lugares públicos. El contagio es muy fácil y frecuente de niño a niño al toser, escupir, etc. El traspaso vía fecal-oral también es frecuente, en este caso los virus contenidos en las heces de una persona contagiada, son pasados a la boca de otra persona no enferma. Por lo general, ocurre accidentalmente cuando los restos de heces quedan en las manos de los niños o de sus madres al asearlos, y no se lavan bien, luego son llevadas a los objetos al tocarlos o manipularlos. Otros niños vienen y tocan esos objetos o ingieren los alimentos contaminados, y ocurre la infección con el virus.
• Infección por bacterias: también la gastroenteritis ocurre por la ingesta de alimentos y bebidas, contaminados con bacterias. Las principales responsables son: Campylobacter, Salmonella y E. coli. La vía de contagio por bacterias ocurre cuando los niños comen alimentos infectados, mal conservados o mal refrigerados, carnes y huevos poco cocidos. Al tocar animales contaminados y llevarse los dedos a la boca.
• Infección por parásitos: como la Giardia Lamblia, a través del consumo de agua contaminada o por vía oral fecal.

2. Alergia alimentaria

Existen otras causas que no tienen un origen bacteriano, viral o parasitario y están relacionados con las alergias alimentarias. Por ejemplo, pueden tener alergia a:

• Las proteínas de la leche de vaca
• Las proteínas de soja
• Los mariscos
• Al cerdo
• Los huevos

En la gastroenteritis, el síntoma más frecuente y evidente es el cambio en la consistencia de las heces de sólidas a líquidas, aumentando su frecuencia, por lo cual se presenta:

• Diarrea
• Fiebre
• Vómitos
• Falta de apetito
• Decaimiento
• Irritabilidad
• Dolor en el abdomen
• Síntomas respiratorios: secreción nasal, lagrimeo, tos...
• Convulsiones (cuando la fiebre es muy alta)

Es importante tener en cuenta que:

• Los episodios de vómitos y síntomas respiratorios indican que la causa es viral.
• Cuando se trata de infecciones por rotavirus, los síntomas son más intensos, los vómitos son constantes, lo que conlleva a la deshidratación rápidamente.
• Si aparece fiebre de más de 40ºC, las heces tienen sangre, el dolor en el estómago es intenso, hay llanto constante, quebranto y convulsiones, puede apuntar a razones bacterianas.

En estos arículos, puedes encontrar más información sobre las heces líquidas en el bebé, las heces con moco en el bebé, las heces verdes en el bebé y las heces amarillas en el bebé.

¿Qué hacer ante la gastoenteritis en bebés? Independientemente de la causa de la gastroenteritis, en todas debe considerarse que existe pérdida de agua y electrolitos, por lo cual la base del tratamiento consiste en prevenir la deshidratación, ayudar en la recuperación y mantenimiento del volumen de líquido en el bebé, así como la conservación de su estado nutricional. Lo que se consigue al suministrarle lo siguiente:

• Suero de rehidratación oral (SRO), contiene un equilibrio entre agua, azúcar y electrolitos, que serán eficaces para evitar la deshidratación y disminuir el tiempo de duración de los vómitos.
• No se deben usar como SRO los refrescos de venta comercial como bebidas para deportistas, ya que contienen bajo contenido de sodio, alto contenido de glucosa (azúcar) y osmolaridad elevada (más iones de los necesarios). Los típicos refrescos comerciales no son uno de los remedios caseros para la gastroenteritis en bebés.
• La alimentación debe continuarse de forma normal, aunque evitando comida pesada, preferiblemente líquida o blanda en un máximo de 12 horas, para ayudar a regular el tránsito intestinal, sobre todo en caso de vómitos.
• En casos de lactantes que reciben lactancia materna, no debe suspenderse porque ha demostrado ser efectiva para la mejoría de los niños.
• Para niños más grandes, la comida debe ser apetecible y variada con frutas, verduras, lácteos y carnes, evitando la grasa o excesos de azúcar.

En el siguiente artículo, encontrás más información sobre la deshidratación en bebés.

¿Cómo curar la gastroenteritis en bebes? Además de las pautas anteriores para evitar la deshidratación, veamos qué medicamentos se utilizan para el tratamiento de la gastroenteritis en bebés:

• Los probióticos como los Lactobacillus han resultado eficaces para el tratamiento de la diarrea aguda, sobre todo la ocasionada por rotavirus. Debe ser administrado bajo receta médica.
• Los antieméticos, pueden ser útiles para controlar los vómitos, pero no deben usarse rutinariamente.
• Los antiperistálticos como la loperamida está contraindicada en niños y no se debe utilizar porque produce efectos secundarios.
• Los antibióticos, no son necesario puesto que la mayoría de los casos de gastroenteritis, son causados por infecciones virales. Quedan reservados solo para casos puntuales de tratamiento, cuando se determine mediante examen de heces cuál es la causa de la diarrea.

Los signos para acudir a urgencias incluyen:

• Deshidratación de moderada a grave (ausencia de lágrimas al llorar, boca y piel seca, orina escasa).
• Bebés somnolientos o débiles.
• Convulsiones.
• Imposibilidad para la rehidratación, bien sea por vómitos continuos, intolerancia a la vía oral, etc.
• Fiebre superior a 40°C.

¿Cómo saber si la duración de la gastoenteritis es normal? ¿Cuánto dura una gastroenteritis en bebés? La gastroenteritis suele durar menos de 7 días y en los casos de agudos agraves menos de 2 semanas.

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