Embarazo en la lactancia: ¿es posible?

Durante la lactancia materna se producen muchos cambios en el cuerpo de la mujer, sobre todo a nivel fisiológico y hormonal. El cuerpo se centra en alimentar al bebé que acaba de nacer y, por lo general, inhibe la ovulación y disminuye el deseo sexual con el fin de que no se produzca un nuevo embarazo. Esto depende de cada mujer, por lo que no podemos generalizar y no a todas las sucederá.

Por ello, es probable que, si das lactancia materna exclusiva y a demanda, los primeros meses después de dar a luz no tengas la menstruación. Pero esto no quiere decir que no te puedas quedar embarazada, ya que hay alguna probabilidad de que se produzca ovulación. Por ello, si das pecho, no te ha bajado la regla y no usas ningún método anticonceptivo, es recomendable que te hagas un test de embarazo para asegurarte, ya que sí que es posible un embarazo.

Durante los primeros 6 meses de vida del bebé, si le das lactancia materna exclusiva y a demanda, es muy probable que no ovules, por lo que la concepción en ese período puede ser algo más complicada, pero no imposible. Mantener relaciones sexuales de forma frecuente sin usar ningún método anticonceptivo puede desencadenar el embarazo.

A partir de los 6 meses, los bebés comienzan a incorporar a su alimentación otro tipo de alimentos de forma progresiva, iniciando así la alimentación complementaria. Su lactancia debe seguir siendo a demanda y debe ofrecerse siempre antes de cualquier otro alimento, pero sus tomas pueden comenzar a disminuir un poco. Esto significa que es más fácil que se produzca la ovulación y, por lo tanto, quedar embarazada. Los trucos que puedes usar son los siguientes:

• Relaciones sexuales frecuentes
• No usar ningún método anticonceptivo
• Fíjate en el flujo: va cambiando a lo largo de cada ciclo, pasando de ser inexistente, a espeso y a líquido como la clara de huevo, indicativo de que se está ovulando en ese momento. Los días de flujo más líquido es más probable quedarse embarazada.
• Test de ovulación: en la farmacia venden test que reaccionan al contacto con la orina e indican el momento en el que se está ovulando con el fin de facilitar la concepción.

Vamos a ver a continuación los síntomas que indican un embarazo durante la lactancia.

Los síntomas de embarazo durante la lactancia, son prácticamente los mismos que cuando te quedas embarazada sin dar pecho. Si no te ha bajado la menstruación todavía, vamos a ver cómo podemos identificar las señales de que estás en cinta:

1. Mucha sensibilidad de pechos: puede manifestarse con dolor, sobre todo al mamar.
2. Menor producción de leche, por ello, muchos niños y niñas se destetan.
3. Cansancio y sueño extremo.

En caso de que tengas un bebé lactante y te has quedado embarazada, deberás consultar a tu matrón o matrona la posibilidad de compatibilizar ambas cosas. Por lo general, en la mayoría de los casos es algo totalmente compatible, pero vamos a ver si cambia en algo la lactancia durante el embarazo:

• Puede modificarse el sabor de la leche.
• Puede disminuir la cantidad de leche a partir del cuarto mes de embarazo aproximadamente.
• Más de la mitad de los niños puede destetarse por estos motivos.
• El calostro aparecerá igualmente días antes del parto.
• Se puede hacer lactancia en tándem una vez nazca el bebé.
• El recién nacido recupera el peso del nacimiento antes y presenta menos crisis de lactancia.
• Ambos van a tener leche suficiente.

Como vemos, a priori no existe ninguna contraindicación ni para la madre ni para los bebés al compaginar embarazo y lactancia. Vamos a ver a continuación en qué casos entraña algún tipo de riesgo.

La lactancia y el embarazo, como hemos visto, son totalmente compatibles a pesar de que pueda cambiar ligeramente el sabor o la cantidad de leche de la madre. No obstante, a pesar de los beneficios de la lactancia para madre y bebé, hay que tener en cuenta ciertos casos en los que puede conllevar riesgo:

• Antecedentes de parto prematuro
• Antecedentes de abortos
• Embarazos múltiples

Esto se debe a que la succión del pecho por parte del bebé hace que la madre segregue oxitocina. La oxitocina desencadena contracciones, por lo que podría estimular un parto temprano. Por ello, el o la matrona deberá valorar cada caso particular, teniendo en cuenta tu historial, y te dará las recomendaciones pertinentes.

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