Desgarro en el parto: qué es, tipos, consecuencias y cómo tratarlo

Desgarro en el parto: qué es, tipos, consecuencias y cómo tratarlo

Los desgarros que ocurren en el parto, también llamados laceraciones, son muy frecuentes y suceden cuando el tamaño de la cabeza del bebé es más grande que el orificio vaginal. Por consiguiente, el estiramiento de esa zona debe ser mayor y se presenta el desgarro.

Existen diferentes tipos de desgarros, dependiendo del grado de lesión que abarquen. Por ejemplo, si la extensión es mínima, la piel se regenera a los pocos días. Por el contrario, otros son más grandes y necesitarán tratamiento médico para curarse. En el siguiente artículo de paraBebés, te hablaremos acerca de desgarro en el parto: qué es, tipos, consecuencias y cómo tratarlo.

Qué es un desgarro en el parto

El desgarro en el parto es una lesión molesta e incómoda que una mujer puede experimentar durante el nacimiento del bebé. Generalmente, se asocia al parto vaginal durante el paso de expulsión del bebé.

Existen diferentes grados, cuando es leve solo afecta la piel y sus alrededores, pero cuando es profunda puede causar daños a la musculatura perineal, lesionar el esfínter anal y al músculo elevador del ano. Estos eventos se presentan con mayor frecuencia cuando utilizan se instrumentos para asistir el parto, es decir, el conocido parto instrumental. Los desgarros en el embarazo son menos frecuentes en casos de parto eutócico o espontáneo.

Tipos de desgarros en el parto

Los desgarros en el parto pueden ocurrir durante el parto vaginal, causando lesiones en distintas áreas de los genitales o la vulva, que comprende los labios mayores y menores, el pubis, el clítoris, el vestíbulo vaginal y el cuerpo perineal.

Todas estas zonas pueden resultar afectadas durante el parto, pero el cuerpo perineal es el que tiene mayor riesgo de rasgarse, probablemente por ser el espacio entre la vagina y el ano que más se ensancha, pero no siempre se ven afectados de la misma forma.

A continuación, te mostramos los cuatro tipos de desgarros que pueden presentarse durante el parto:

  • Desgarro de primer grado: afecta únicamente la piel perineal de forma superficial.
  • Desgarro de segundo grado: involucra el perineo y los músculos del perineo.
  • Desgarro de tercer grado: afecta los músculos que rodean el ano. Existe rotura del esfínter anal.
  • Desgarro de cuarto grado: existe rotura del ano, del esfínter anal y del tejido debajo del mismo.

La mayoría de los desgarros que se presentan son de primer y segundo grado. Solo un pequeño número de partos se complican hasta sufrir desgarros más graves de tercer y cuarto grado.

Existen otros tipos de desgarros en el parto como los que ocurren en los labios mayores y/o menores, cerca de la uretra o el clítoris. Estos son difíciles de sanar porque los puntos son más delicados en estas zonas sensibles. En ocasiones, es probable que sean necesarios puntos de sutura si son muy extensos o si empiezan a sangrar.

Consecuencias de un desgarro en el parto

Los desgarros en el parto pueden afectar al suelo pélvico. Esta zona comprende las estructuras musculares y los ligamentos que sostienen los órganos del área abdominal como el abdomen, aparato digestivo, urinario y reproductor.

Así pues, al tener un desgarro este puede provocar incontinencia urinaria y anal, así como disminución en la sensación de orgasmo femenino por la debilidad del suelo pélvico. Afortunadamente, existen métodos para lograr recuperar las funciones del suelo pélvico de forma exitosa. De hecho, puedes empezar a fortalecerlo antes del parto. En este artículo encontrarás 10 ejercicios de suelo pélvico para el embarazo.

Cuidados de un desgarro en el parto

Si te preguntas cómo curar un desgarro por parto, a continuación, te mostramos cuidados para tratarlo:

  • Mantén la zona del perineo limpia para evitar infecciones.
  • Evita que la zona permanezca húmeda: después de lavarte con agua y jabón neutro, sécalo con una toalla limpia.
  • Evita mantener la herida siempre cubierta: es adecuado dejarla al aire libre durante un rato para que sane más rápido.
  • Modifica la forma de sentarte: lo más adecuado es que no te apoyes por completo, sino que lo hagas de lado y evita las almohadas.
  • Evita llevar la ropa muy ajustada: trata de que la ropa interior sea de algodón para que te sientas fresca y la piel “respire”.
  • Aplica hielo en caso de molestias e inflamación: puedes aplicarlo envuelto en una toalla limpia o compresas frías sobre la zona, para ayudar a recuperar el tejido y calmar el dolor.
  • Cambiar regularmente las toallas sanitarias.
  • Haz masajes suaves con aceites o cremas hidratantes cuando te hayan retirado los puntos.
  • Practica ejercicios de suelo pélvico una vez que los puntos hayan sanado y no existan complicaciones agregadas.

Cuánto tiempo tarda en curarse un desgarro en la vagina

Si para curar la herida ocasionada por el desgarro en el parto fue necesario poner puntos de sutura, la recuperación llevará entre 2 y 3 semanas.

Ante los desgarros vaginales es importante seguir los cuidados mencionados en el apartado anterior. Adicionalmente, también se pueden tomar medicamentos para el dolor, como antibióticos preventivos para evitar infecciones, y laxantes para suavizar las heces, con la finalidad de evitar complicaciones y promover una recuperación exitosa.

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Bibliografía
  • Díez I, Cassadó J, Martín A, Muñoz E, Bauset C y López-Herrero E. (2020) Lesión obstétrica del esfínter anal. Otros desgarros perineales. Prog Obstet Ginecol. 63: 01; 48-53.