¿Cuándo les sale el pelo definitivo a los bebés?

Algunos bebés nacen con una melena larga y abundante y otros, en cambio, prácticamente no tienen pelo. Pero, ¿sabías que el pelo comienza a salir en el feto al principio del segundo trimestre de gestación? Recibe el nombre de lanugo y funciona como una capa protectora de la piel, por la falta de grasa corporal, desde la semana 13 de gestación, aproximadamente. Primero, aparece en la cabeza para, posteriormente, cubrir todo el cuerpo del bebé en desarrollo. En el momento del nacimiento, la mayoría de los niños y niñas ya habrán perdido el lanugo, pero a algunos todavía se les podrá observar en algunas partes de su cuerpo, sobre todo a los prematuros. Si es así no te preocupes porque se irá cayendo poco a poco.

El pelo de la cabeza, en cambio, es muy fino en el momento del nacimiento y, alrededor de los tres meses de edad, pueden aparecer calvas en la cabecita de nuestro bebé ya que empieza a dar lugar a un pelo más fuerte. Las calvas, normalmente aparecen en la parte posterior de la cabeza y los laterales, aquellos lugares donde la está en contacto al dormir. Cabe mencionar que no siempre se les cae el pelo ni aparecen calvas.

Tenemos que diferenciar dos tipos de pelo en los bebés:

• El pelo del principio, que es el lanugo y el que podemos encontrar en la cabeza.
• El pelo terminal, que es aquel que nunca se va a caer ni va a mudar.

Este último se corresponde con el de las cejas y las pestañas, ya que tienen una fuerte acción protectora de los ojos frente a cuerpos extraños. Si nuestro bebé tiene las cejas de color claro puede deberse a dos factores: o que su color de pelo definitivo vaya a ser así, o que aún no haya actuado en él la melanina, cuestión que veremos más adelante. Si sus cejas son claras, puede ser que su pelo también lo vaya a ser, pero no es un hecho indicativo de nada y, hasta los 2 años más o menos, no podremos saberlo.

Como hemos visto anteriormente, alrededor de los tres meses de edad el pelo comenzará a salir más fuerte y en más cantidad. En ese momento se empezarán a apreciar los rasgos característicos del mismo: rizos, liso, fino, grueso… es probable que el color del pelo cambie en este momento también, debido a la muda y a la acción de la melanina.

La melanina es un pigmento con el que cuenta el organismo de todos los mamíferos y es el encargado de dar el color del pelo, de la piel y de los ojos de los mismos. Cuando nos exponemos al sol, la melanina absorbe sus rayos, es decir, los rayos Ultra Violeta, y es cuando empieza a producirse un cambio de color en nuestro cuerpo.

Cuanta mayor melanina se produzca, más oscuros serán los colores (morenos, castaños) y, cuanta menos melanina esté presente, los colores serán más claros (rubios o pelirrojos en este caso). Teniendo en cuenta esto, los bebés nunca han sido expuestos al sol en el momento del nacimiento y han permanecido a oscuras todo el tiempo, por lo que, cuando comiencen a tener contacto con él, el tono de su pelo irá cambiando poco a poco.

Es un proceso progresivo y tardará varios meses o años en establecerse un color de pelo final. Normalmente, alrededor de los 2 años de edad, podremos ver el pelo definitivo. Es por ello, que muchos niños y niñas de pequeños son muy rubios y al cabo de un tiempo se tornan morenos.

Para finalizar, cabe destacar que lo de rapar la cabeza a los bebés no hará que su pelo crezca más fuerte, lo único que conseguiremos con ello será arreglar las diferencias que pueda haber y poner a nuestros hijos e hijas más guapos si cabe.

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