Cómo despertar a un bebé de la siesta

Los primeros meses de nuestro bebé suelen ser los más agotadores debido a su ritmo de sueño y vigilia. Los hábitos de sueño en los bebés son muy diferentes a los del adulto, pues ellos necesitan más horas de sueño para su adecuado crecimiento y desarrollo neurológico.

Los bebés recién nacidos duermen alrededor de 16 a 18 horas diarias, se despiertan cada 3 a 4 horas, para alimentarse pues su estómago es muy pequeño, por lo que se llena y vacía con rapidez. Están en vigilia solo 1 o 2 horas en cada ciclo. Estos ciclos de sueño son influenciados por la alimentación, exclusiva de lactancia materna o de fórmula, y por el aseo.

Esto varia a medida que pasan los meses, pues el bebé duerme más tiempo y tiene más horas de vigilia debido a que su estómago va creciendo y se mantiene lleno por más horas. Esto permite espaciar sus tomas y dormir más tiempo.

Es importante destacar que cada bebé es único, así como sus hábitos de sueño. Lo primordial es que conozcas como es el ritmo de tu bebé y que vayas creándole hábitos en función del ritmo circadiano, es decir, diferenciando el día de la noche. Algunos niños logran dormir a partir del tercer mes unas 5 o 6 horas seguidas y otros tardan un poco más.

Normalmente, no es necesario interrumpir el sueño de un bebé, sin embargo, existen situaciones que lo requieren, ya sea por su salud o para ir creándole hábitos saludables. A continuación, te contamos cuándo despertar a un bebé de la siesta:

• Para alimentarlo: si el bebé se siente cómodo y sin hambre, es normal que duerma largos periodos de tiempo, especialmente cuando sus sueños son tan profundos que les impide despertarse para alimentarse. Esto ocurre durante el primer mes de vida y en esta etapa muchos pediatras recomiendan despertarlos, pues es cuando el bebé está ganando peso.
• Si el bebé tiene síntomas de deshidratación: uno de ellos es la somnolencia. Lo habitual las primeras semanas es despertarlos cada 3 a 4 horas. A partir de las cuarta semana de nacido puedes dejarlo dormir tiempos más prolongados. En caso de que el bebé tenga vómitos, diarrea y síntomas de deshidratación, debes aumentar la frecuencia de las tomas de leche y despertar al bebé. En este artículo, te contamos las causas, síntomas y tratamiento de la deshidratación en bebés.
• Crear hábitos de sueño: algunos bebés duermen horas ininterrumpidas de día y esto provoca que durante la noche estén despiertos. Si esto ocurre, los profesionales de salud recomiendan limitar las horas de sueño durante el día. En este artículo encontrarás información sobre qué hacer si a mi bebé le cuesta dormir.

Despertar a un bebé, especialmente a un recién nacido, no es una tarea fácil porque suelen dormir profundamente. Despertarlo requiere de mucha paciencia y delicadeza para hacerlo sin que llore Por eso, a continuación, te mostramos consejos útiles sobre cómo para despertar a un bebé sin que llore:

1. Acércalo a ti y estimúlalo muy suavemente: puedes cantar, hablar, acariciarle las mejillas, las manos y los pies. Mueve sus bracitos y sus piernas con mucha delicadeza y poco a poco irá despertando sin llorar.
2. Hazle un suave masaje: hacerlo en forma de las agujas del reloj en la planta de los pies con el pulgar. Esto lo hará despertar.
3. Cambia poco a poco su pañal: los movimientos que se realizan al cambiarlo harán que el bebé despierte.
4. Desvístele poco a poco: la exposición de la piel al aire les resulta incomodo y, por eso, al desvestirle se despertará. Cuando lo hagas acércalo rápidamente a tu piel.
5. Haz contacto piel con piel con tu bebé: tu olor y tu calor lo relajará y hará que sea más fácil que agarre el pecho, aun así, no dejes que se duerma en la toma.
6. Volverlo a vestir: si desvestirlos no los despierta, vuélvelo a vestir con suaves movimientos.
7. Ponlo en posición vertical: es recomendable que cuando sientas que el bebé se despierta, lo tomes en brazos y lo pongas en posición vertical. Esto hará que el bebé termine de despertarse.
8. No lo despiertes de forma brusca: como es el caso de movimientos fuertes o sumergiéndolo en la bañera. Esto, aparte de molestarlo, hará que el bebé llore, no quiera aceptar el pecho y pase algún rato irritable.

Si tu bebé duerme mucho no debes preocuparte, ya que se debe a su ritmo biológico normal de adaptación. Aun así, si el bebé pasa largos ratos sin alimentarse, conviene despertarlo para evitar problemas de salud como bajo peso, especialmente si son bebés prematuros.

Debes tener en cuenta como es el ciclo de sueño de tu bebé para planificar las actividades diarias, como alimentarlo y asearlo. De todas formas, si sientes que tu bebé duerme mucho y eso está influyendo en su bienestar, coméntalo con su pediatra.

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